• 21 •

215 19 0
                                    

Martín me llevó a un bar donde al parecer había personas de muchos países: Venezuela, Argentina y Colombia (por lo que dijo Martín).

- ¿Qué vas a pedir? - preguntó Martín mientras nos sentábamos en una mesa

- Una piña colada - ya sé que eso es cero fiestoso.

- ¿Qué tal un tequilita?

- okey, solo porque me hace falta

Martín ordenó 4 shots de tequila y luego volteó a verme un poco raro

- no me digas que es la primera vez que vienes a un bar - dijo al verme voltear hacia todos lados
- no, solo que no acostumbro, te recuerdo que estudio
- cierto, y ¿Qué tal te va defendiendo a las personas?
- Espero que me vaya bien, te recuerdo que sigo estudiando
- ¿En qué semestre estás?
- Décimo
- Entonces espero que cuando necesite a mi cuñada me pueda defender
- Empezando porque espero que no te pongas tan borracho - reí - si estuviéramos en México nos podrían suspender la licencia o meternos al ministerio público por manejar borrachos, pero como no es nuestro caso acepto ponerme un poco pasada de copas
- Esoo!! - celebró
En ese instante llegó el mesero con nuestros shots. Martín agarró el suyo y lo levantó
- Por tener una cuñada nueva
- Y yo un cuñado nuevo - ambos álzanos nuestros tequilas y los chocamos en forma de brindis, para mi mala suerte hice una cara de fastidio al tomarme ese primer caballito, tal vez hubiera estado mejor si hubiera pedido una piña colada.
Pasaban las horas y mientras bailamos, reíamos y tomábamos mi descendencia de abogada se fue convirtiendo en una mujer que solo disfrutaba del momento, aunque no era la única pero digamos que Martín estaba menos ebrio; en el camino a casa al parecer Martín cuidaba de mí que yo de él.

...

- soy me duermo en el sillón tu aquí acuéstate - dijo Martín mientras me tapaba con la cobija de su cama.
- Buenas noches


Desperté con un dolor inmenso de cabeza, les juro, no sé cómo los borrachos siempre dicen "no voy a volver a tomar" pero vuelven a tomar, ¿cómo curan la cruda?

Salí del cuarto y vi a Martín durmiendo plácidamente, me dirigí a la cocina y me serví un vaso de leche.
- no soy experta en crudas, así que solo voy a limitarme a tomar un vaso de leche - me dije a mí misma.
- Bueno días señorita - sentí una voz muy cerca de mi oído, voltee y de inmediato tenía sus labios en los míos, imagínense sentir el amor en tus labios desde temprano.
- Buenas - respondí cuando nos separamos
- Como que mi hermano te hizo conocer la cruda ¿o me equivoco? - dijo risueño
- Yo también puse mi granito de arena - ambos reímos
- ¿Simón levantándose de buenas? - entró Isaza a la cocina
- Isaza - dijo entre dientes Simón
- Bueno yo me voy a bañar - le di un beso rápido y salí de la cocina, topándome con Martín
- Vaya, sobreviviste - dijo mientras ambos caminábamos al pasillo donde se encontraban los cuartos
- Yess - ambos reímos y cada quien se metió a su cuarto (en este caso yo al de Simón)

- Buenas - respondí cuando nos separamos - Como que mi hermano te hizo conocer la cruda ¿o me equivoco? - dijo risueño- Yo también puse mi granito de arena - ambos reímos - ¿Simón levantándose de buenas? - entró Isaza a la cocina- Isaza - dijo ent...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El Amor Perfecto | Simón Vargas | MoratDonde viven las historias. Descúbrelo ahora