🍓Veinte🍒

2.7K 316 52
                                    

Yoongi estaba acostado Boca abajo sobre un gran tapete afelpado blanco, el cuál había comprado hace dos semanas atrás, su computadora estaba frente a él y un tazón a su costado lleno de palomitas de maíz. Vió una pequeña manita tratar de tomar un puñado de palomitas, no logrando su cometido, soltó una risita.

- No te rías, tonto - Bufó Jimin golpeando el brazo de Yoongi.

- Deberías bajarte de allí si quieres comer palomitas - Sonrió, Jimin arrugó su nariz.

- Aquí es cómodo, Yoonnie - Dijo recostado su cabeza sobre la espalda del mayor.

Mientras Yoongi estaba acostado Boca abajo, Jimin estaba sobre su espalda.

- Bien, Uhm..., Ya me aburrí de está película - Hizo una mueca mirando su laptop.

Jimin asintió. - Si, a mi igual - Se acercó al oído de Yoongi y Susurra. - Que tal si salimos de compras - Yoongi sonrió.

- Me parece una estupenda Idea, vamos - Jimin sonrió en grande mientras bajaba de la espalda del peli negro.

Jimin se dirigió hasta el espejo completo para observar si se veía bien, mientras del mayor arreglaba las cosas.

- Yoonnie, ¿Que te parece si me tiño el cabello? - revoloteó su cabello.

Yoongi llegó por detrás y lo abrazó por la cintura.

- Te vez hermoso con el cabello negro, pero si quieres puedes teñirlo - Opinó sonriendo.

Jimin Puchereo inconsciente mientras pensaba en algún color para su cabello.

- ¿Castaño? - Yoongi asintió.

- se te vería excelente - beso su mejilla.

- No, mejor rubio, ¿Qué dices? - Yoongi río.

- Ángel, todos los colores te quedarían genial - Jimin bufó.

- Siempre dices lo mismo - Puchereo - ¿Pero cuál elijo? - el pelinegro mayor pensó un poco.

Su pequeño ángel se le veía hermoso todos los colores, si que era difícil escoger.

- ¿Rosa...? - murmuró.

Jimin abrió sus ojitos en grande y asintió.

- ¡Si, si! ¡Ese color será! ¡Vamos ya! - Tomó el brazo del mayor y lo arrastró hasta fuera de la habitación.

Cuándo salieron se encontraron con la señora Min, está traía un cesto de ropa sucia.

- buen día HeeYoung - Jimin hizo una reverencia.

La señora Min le había dado toda la confianza a Jimin de llamarla por su nombre, algo que al principio Jimin no se acostumbraba a decir, pues no quería ser irrespetuoso.

- Buen día Minnie - Sonrió en grande - Uhm... Yoon venía por la ropa sucia - Miró a su hijo.

- Hoy no tengo ropa sucia - Habló. - Mamá, saldré con Jiminnie, vendremos algo ¿Tarde? - Miró al menor.

- No tan tarde - sonrió Jimin.

- Bien, vayan con cuidado - Palmeo el hombro de su primogénito.

El chico del supermercado © (Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora