🍓Diecinueve🍒

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Las fases o etapas más importantes de un cortejo son las siguientes.

En primer lugar tenemos la atención, decir que Yoongi no le prestaba a Jimin atención sería una completa mentira, adoraba cuándo su ángel hablará de películas o series románticas, algo que a Yoongi no le gustaba, pero le encantaba que Jimin le explicará cómo es que los protagonistas se conocían, o cuándo hablaba de los animales, sobre todo los insectos, les decía que eran muy feos y asquerosos, pero que eran importantes en el ecosistema, amaba cuándo Jimin se ponía a cantar y bailar cuando escuchaba una canción en una área pública, sin importarle lo que diga el resto, el solo lo contemplaba y admiraba, como una obra de arte digna de Admirar.

A Jimin también le encantan escuchar a Yoongi hablar sobre música, sobre las notas agudas o las más graves, sobre todo en las matemáticas, el pelinegro las amaba, pero a Jimin no le gustaba o atraía esa materia, aún si, Jimin ponía total atención en lo que Yoongi decía o hacia.

Los gustos de Ambos eran diferentes, pero algunas cosas coincidían, Sin importa eso, Yoongi y Jimin le daban la atención adecuada al contrario, eso era muy importante en una casi-relación. Además de la confianza.

A Jimin le encantaba llamar la atención de Yoongi, ya sea con un conjunto nuevo de ropa, maquillaje, ya sea gestos o incluso acciones. Amaba como Yoongi lo miraba.

Yoongi amaba mirar a Jimin y nunca dejaría de adorarlo, de verlo como una obra de arte, le encantaba el carácter del menor, su rostro, incluso su cuerpo, era muy hermoso.

La comunicación y la confianza, Jimin y Yoongi no se ocultaban nada, el menor siempre que no le gustará algo, se lo hacía saber a Yoongi, de igual manera Yoongi a Jimin. Si una mujer miraba a Yoongi, Jimin fruncia su ceño y llamaba la atención del mayor, aún cuándo este no estaba enterado de la mirada de la mujer, Jimin le hacía saber que no le gustaba como lo veían, El pelinegro lo entiende y le dice que solo tenía ojos para él, y que no le tomará importación a los demás.

A Yoongi le molestaba cuando a su casi-novio lo miraban de manera obsena, como si quisieran desnudarlo, eso le molestaba mucho, y el menor no lo notaba, es por eso que Yoongi se colocaba del otro lado y escondía a Jimin, el menor no decía nada, solo le importaba tomar la mano de Yoongi, sin importarle el resto, Yoongi se encargaría de protegerlo de todo, su ángel era alguien muy inocente y lindo, no dejaría que nadie se pasara de listo, él estaría ahí para todo, con tal de ver siempre esa sonrisa en su Ángel.

(...)

Jimin estaba sentado en las piernas de Yoongi Mientras comía pequeñas galletitas en forma de animalitos, ambos estaban viendo una película de Disney, algo escogido por Jimin, aún cuándo a Yoongi no le encantaba mucho esas películas, estaba feliz estando con su menor.

- ¡No sigas al conejo! - Dió un saltó, Yoongi tomó la cintura de Jimin y mordió su labio. - ¡Estúpida, te caiste por estúpida! - Yoongi no podía concentrarse bien, El menor estaba dando leves saltos sobre su regazo.

No quería ser pervertido, Jimin no lo hacía con segundas intenciones, se sentía un pervertido, su entrepierna había despertado.

- J-jiminnie - El menor Bufó y volteó su rostro para ver a Yoongi.

- ¿Si, Yoonnie? - Ahora se sentía peor que un pervertido.

- Cariño, iré al baño, ¿Si? Hace calor iré a ducharme - Jimin asintió mordiendo una de sus galletitas.

El menor se levantó y vió a Yoongi correr al baño, ladeó su cabeza confundido, alzó sus hombros sin importancia y se sentó en la cama.

- Alicia tonta - Dijo mordiendo otra de su galletita.

Yoongi estaba mirando su entrepierna, dios, se sentía un completo degenerado por sentir eso cuando su ángel era eso, un ángel e inocente, él no lo hacía con dobles intenciones, eso lo hacía sentirse mal, como un pervertido.

Quitó con rapidez su ropa, ignorando su erección, abrió el grifo de la ducha y se adentro, el agua casi helado cayó sobre su cuerpo y esperaba que se quitará con eso su gran problema, no quería tocarse, se sentía cochino por eso, sobre todo si pensaba en su meloncito.

Al salir de la ducha se colocó una toalla en la cintura y otra sobre los hombros, secando su cabello, salió y vió a su meloncito sonreír viendo la laptop.

Jimin divisó a Yoongi y Rápidamente cubrió sus ojitos.

- ¡Yoongi, vístete! - Gritó, escuchando la risa del mayor.

- bien, llevaré mi ropa al baño - Jimin asiente sin destapar sus ojos.

Jimin escuchó una puerta ser cerrada, lentamente quitó sus manos de su rostro. Encontrando a nadie más en la habitación.

Aún le causaba vergüenza ver a Yoongi sin camisa, tenían confianza, si, pero no tanta como para verse desnudos.

Luego de un rato Yoongi salió ya vestido, con unas prendas cómodas, mientras seguía secando sus cabellos.

- Listo - Dijo alzando sus brazos, dando una vuelta.

- Bien - Dice Jimin dejando sus galletas a un lado y cerrando la laptop.

Se levanta sobre la cama y camina Hasta Yoongi, dónde abre sus bracitos para que el mayor lo cargué. Yoongi ríe y se acerca para tomar al menor y cargarlo, haciendo que este se pegará a él como un koala.

- Yoonnie, ¿Podemos pedirle a mamá HeeYoung que preparé huevitos de codorniz? - dice olfateando el cuello del mayor.

Yoongi ríe. - Tu y mamá se llevan muy, eh - El menor sonríe asintiendo.

- Tu mamá es muy linda conmigo, YoonYoon - dice sonriendo.

- Y tú madre conmigo, Chimchim - Besa su mejilla.

Y si, la madre de Yoongi tenía una cierta preferencia hacia Jimin, más que a su propio hijo, pero siempre que le recordaba que lo amaba mucho. Yoongi se sentía celoso, y a la vez feliz de que se llevarán muy bien.

Por otra parte la madre de Jimin quería como un hijo propio a Yoongi, era casi como La madre se Yoongi con Jimin, pareciera que HeeJin fuera madre de Yoongi y HeeYoung fuera madre de Jimin.

Las madres de ambos se habían llevado de maravilla, incluído compartieron los mismo gustos, ambas decían que eran almas gemelas y mejores amigas. E incluso querían unir más a sus hijos, sin meterse mucho en su casi-relación.

El chico del supermercado © (Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora