Capítulo 3

1.1K 110 12
                                    

Pasaron los días y por fin llegó el tan esperado cumpleaños. Era en una pizzería al lado de una plaza para que los niños pudieran jugar.

Mirabel y su tío ayudaban en preparar la mesa para los invitados, aunque los familiares de la cumpleañera les dijera que no hacia falta.
Aún así a Mirabel y a Bruno les encantaban ayudar a la gente aunque no los conozcan.

Cuando todo estuvo listo, los invitados iban entrando uno a uno, hasta que llegó Leidy acompañada de Lucía.

Leidy era una niña de 7 años (aunque ahora ya tenía 8) iba vestida con un vestido de color blanco con una corona de flores,estaba muy linda,tenía la piel morena con ojos marrones como su pelo.

Bruno no pudo evitar tener recuerdos por ese vestido.
Tanto estaba en sus pensamientos que  no notó cuando la niña se le acercó muy emocionada.

-¿Usted es el señor de las ratas? - Preguntó con un a gran sonrisa viendo como una rata se intentaba esconder en el pelo largo de Bruno
-¡Leidy!- La madre de la pequeña la reprendió un poco.- Perdone es que siempre a sido así de inquieta.

Bruno sólo se puso a la altura de la niña con una sonrisa de oreja a oreja.
-Dentro de poco mi sobrina y yo haremos un gran espectáculo, pero tienes que ser paciente.

-¿Con las ratas?
-Si, con las ratas.Aunque ya habrás conocidos a Oscar.- La pequeña rata quien aún seguía con su intento de esconderse paró y saludó a las niña con su patita.

Leydi le devolvió el gesto divertida.

El cumpleaños transcurrió con normalidad, los niños comían y jugaban y los mayores hablaban entre ellos.

-Como todos sabréis hoy es el cumpleaños de mi princesa.-El padre de Leydi comenzó hablar sin notar el leve sonrojo de su hija. - En esta ocasión unas personas muy especiales han venido a dar un regalo muy especial para una persona muy especial. - El hombre dejó de hablar por un momento. - ¿He dicho ya muy especial?-Preguntó lo último en broma haciendo que los demás se rieran.

Bruno y Mirabel se acercaron hacia el padre. Mirabel le pidió el micrófono, mientras su tío preparaba a las ratas ella se dispuso a hablar. - Bueno, como ya muchos sabréis, mi nombre es Mirabel y de él... - Señaló a su tío con la cabeza. - Es mi tío Bruno.-Mirabel dirigió su mirada a Leydi.-Bueno...pues ahora vamos a comenzar.

Mirabel se puso en en el centro para empezar a cantar.

La canción que sonará ahora tiene la melodía de "la familia Madrigal"

Amelia, Sofía.                   Raimi,Oscar.
Las ratas nombradas empezaron a tocar sus instrumentos para el asombro de los espectadores.

¡De una!

En este lugar hay una gran fiesta y música con ritmazo sin igual

Hoy es el día, hoy es el gran día, en donde el mundo una gran niña vió llegar.

¡Hey! No a que olvidar para quien es esta canción, es para esa niña que su sonrisa brilla más que un sol.

Mirabel señaló con la mirada a Leidy quien estaba empezando a bailar.

La canción iba terminando hasta que le tocó el turno a Bruno y empezó a cantar mirando directamente a los ojos de la niña.

Hace 8 años, tus padres recibieron...un gran milagro.
Y ahora todo el mundo lo está celebrando.
Tu familia,felizmente fue bendecida.
Por tí, tu eres su alegría.

Mirabel, Bruno y las ratas terminaron con una revelencia.

Hubo un pequeño silencio, ninguno se podría creer que aquel tío y su sobrina tendrían aquella voz tan hermosa y para colmo las ratas sabían tocar instrumentos.

Lucía también se había quedado sin habla. Mirabel ya le dijo que eran buenos, pero tampoco se esperaba tanto.

Cuando terminaron de su asombro aplaudieron a más no poder, incluso las personas que sólo pasaban por hay  pararon para escuchar.

Leidy fue la que más aplaudió y corrió hacia donde estaban la joven y su tío (y las ratas)
-¡Ha sido increíble!- Leidy abrazó a Mirabel para la consternación de esta pero luego le devolvió el abrazo.
-Leidy... - La madre de la niña rodó los ojos hacia la falta de educación de su hija, pero no dijo nada más porque ella también se sentiría emocionada por tal espectáculo.

Con Bruno.
En la mesa de los adultos todos no paraban de elogiar a Bruno.
-Cantas de maravilla.
-Seguro que te invitan a muchas fiestas.
El hombre de 50 años que siempre había sido muy introvertido solo agradecía un poco tímido.
-Los 30 son los mejores años.
-¿Quien dice eso?
-Pues yo.-
Todos se rieron.

-En realidad...- Bruno paró por un momento para asegurarse de que todos le escuchaban. - Tengo 50 años...

Hubo un pequeño silencio, todos se miraron uno a uno sin saber que decir. Aquel hombre que era incluso más bajo que las mujeres, que hablaba y cantaba como un hombre de 30 y poco, y que encima parece un niño introvertido... ¿¡TIENE 50 AÑOS!?

-Debes de estar bromeando.- Dijo uno de los adultos riéndose un poco.
Bruno sólo se encogió de hombros.
-No es la primera vez que me dicen algo similar.- Dijo con una pequeña sonrisa.

Las ratas que estaban jugando en la mesa se acercaron a los padres de Leidy para saludarlos.
-Hola,somos los padres de Leidy.- Acercaron sus manos hacia el hocico de las ratas riéndose un poco. - Nos llamamos Carolina y Sebastián.-

Mientras que Carolina y Sebastián jugaban con las ratas, Bruno sintió un gran dolor de cabeza que le hizo quejarse. Todos voltearon hacia el preocupados.
-No, no es nada, siento mucho preocuparlos.- Dijo dando una sonrisa falsa y dirigiendo su mirada hacia su sobrina quien estaba ausente de lo que estaba sucediendo, ya que estaba ocupada charlando con Lucía y jugando con Leydi.

¿Dones?¿Qué es eso?-Encanto[Au] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora