Tokyo Revengers: Escenarios

| Beso pt 2 |

¿Cómo sería darle un beso por primera vez?

Perdón la demora, tuve un bajón xd

⚠️TW: menciones de homofobia (Yuzuha)⚠️

Hanemiya Kazutora

— Un poco más de agua ahí, por favor. — señaló (N) detrás de Kazutora. La chica vestía un overol de shorts algo desgastado de mezclilla junto a una camiseta amarilla, zapatos del mismo color y un sombrero de paja en su cabeza.

— ¿Tú crees? — el de mechas rubias soltó un jadeo de cansancio. — Yo creo que está bien.

Él vestía unos shorts de baño azúl marino y una camiseta negra con diseño de gatos, también con un sombrero de paja, cortesía de (N).

La (c/c) negó con la cabeza. — No, no, esas sí necesitan mucha agua. — dió la vuelta para seguir revisando y regando sus flores. — Oh, que bonita te ves. — acarició las dalias.

Hanemiya secó su frente con sudor y vió lo que tenía que regar, unas "palmeras cortas y de hojas súper largas" justo a la pared de vidrio de aquel invernadero.

— ¿Por qué hacemos esto? — preguntó Kazutora por lo bajo mientras echaba agua a la tierra.

— Porque tú te ofreciste, Kazu. — dijo (N), el nombrado saltó en su sitio dando un chillido del susto. — Escucho muy bien, ya te lo había dicho, ¿No? — rió.

Hanemiya había llamado a (N) para invitarla a salir, sin embargo, le dijo que tenía que ir a ayudar al invernadero y él, como gran novio, se ofreció a ayudarlo, no creía que fuera tan pesado, llevaban más de dos horas encerrados entre plantas y paredes de vidrio.

— Pero no sabía que tan bien. — el de mechas rubias palpó la tierra, estaba húmeda pero no "mojada", justo como le había dicho la (c/c). — ¿Dónde más?

— Mmm... — (N) se levantó y miró el lugar. — Normalmente hago esto sola, así que... — dió una mirada más y aplaudió dos veces. — Nos faltan las fresas, poinsetias y sandías ¡Ven! — tomó el brazo del de cabello bicolor y lo arrastró a la zona.

Kazutora admiraba como brillaban los ojos de su pareja brillaban al ver sus plantas, él con suerte lograba que un cactus se mantuviera vivo por tres días.

Hanemiya olió las flores rojas que parecían hojas y puso cara de asco. — Eww, no huelen bien como en las series.

La fémina rió. — Yo también me desilusioné cuando los girasoles olían mal. — luego agarró una de las frutas grandes en las enredaderas. — ¿Te gusta la sandía?

— ¿Me puedo comer las fresas? — preguntó al ver las frutas colgando de las hojas, lo rojas y grandes que se veían hacían que su boca salivara. Agarró dos.

— ¡No, te vas a envenenar! — (N) tomó la mano de su novio para detenerlo. — Se tienen que lavar muy bien, puedes enfermarte o morir.

Kazutora miró las fresas con sorpresa e hizo la acción de querer metérselas a la boca. — Provecho.

— ¡No! — la (c/c) casi que saltó para quitarle las fresas de las manos. — ¡Kazu!

— A ver alcánzalas. — el de mechas rubias levantó la mano, aprovechando la baja estatura de su pareja y comenzó a correr por el invernadero.

— ¡Tora no te las comas! — exclamó correteando al nombrado. Pasaron de las fresas a la zona de dalias, rosas blancas, claveles, algunos cactus, palmeras, etc. y terminaron en la zona de las sandías.