𝐴𝑚𝑖𝑔𝑎... σ ¿𝑵𝒐𝒗𝒊𝒂?

° CAP 25 ° Fuera de mi cuerpo

Me había alejado Charlotte había tomado mi lugar por así decirlo, ahora me pasaba en mi cuarto leyendo, durmiendo y escuchando música, escuchaba las risas que provocaba Charlotte en Ayato, laito y kanato se la había arreglado para acercase a shu, eso provocaba lo contrario con Reiji....

Iba caminando a su laboratorio, pues era el que me recomendaba aquellos libros que me tenían noche y día en mi habitación, me paré en la puerta y suspiré para después tocar, no escuché respuesta a lo que decidí pasar, asome mi cabeza y todo estaba como Reiji lo dejaría limpió y ordenado estaba alfrente de la ventana sumido en sus pensamientos, por curiosidad decidí ver en lo que pensaba

En ella se podía apreciar un escenario, en el cual estaba shu y Reiji de pequeños Beatrix le decía a shu lo bueno que tenía que ser, para ser la cabeza de la familia, mientras que Reiji leía un libro y fruncía el ceño...

Un ataque te rabia hacia shu se hizo presente en Reiji, lo pude sentir.. me acerqué con intenciones de calmarlo, shu no tenía la culpa pero aún así seguía siendo blanco de su ira, lo tome por el hombro y se tensó voltio sobresaltado

—Reiji...no tienes que sentirte de esa manera, eres inteligente, lindo, caballeroso y que una persona no haya visto eso no significa que otro no lo vean, me tienes a mi no espero que sea suficiente para ti, pero no quiero que te sientas solo... quiero que sepas que siempre puedes contar conmigo...—Hablo con tacto mientras lo miraba.

—La única persona que quiero que vea eso en mi eres tu...—Me tomo de la cintura con delicadeza, y me acercó a él

—Reiji... Esto no está bien...—me sorprendió y lo único que pude decir.

—Solo déjame...—Dijo acercándose más a mi rostro, en serio mi primer beso va hacer con Reiji, nunca me había puesto a pensar si me gustaba unos de los hermanos, y estando en esta situación menos, nuestras respiraciones chocaban, yo simplemente lo intentaba alejar pero no resultaba, cerré mis ojos con fuerza...

—¡OE, Reiji!—Escuche gritar a ayato desde la puerta inmediatamente Reiji se voltio irritado soltandome. —¡pero que demonios!, ¡Reiji aléjate de lo que es de ore-sama!.—Ayato avanzó hacia nosotros y me jaló del brazo, sacándome del laboratorio y llevándome a un lugar apartado En el proceso me solté del agarre y lo encare.

—¡Ayato!, Deja la estupidez y sueltame—Sacudí mi brazo con enfadó, no era manera de tratarme el me acorraló en la pared mirándome fijamente su mirada no me intimidaba nunca había dejado que me lo hicieran y hoy no iba a comenzar.

—¿Lo dejarías?—Su pregunta me desarmó y mi mirada cambio a una desconcertada como que ¿"Dejarlo"?

—¿Ah..?—Solté confundida.

—Tck ¿!Que si ibas a dejar que el cuatro ojos te basará!? —Lo decía como si esperara que deberá que no, pero no sabía lo respuesta si todo fuera seguido asi.. si él no fuera llegado ¿Que hubiera pasado?

—!No¡ O eso creo...—Este antes de que pudiera decir algo me beso tomo mis manos para evitar que impidiera el beso.—A-ayato...—Gran error en abrir mi boca, pues su lengua se metió en la misma era una sensación rara pero todo eso no importó ya que este me mordió haciendo que sangra y bebiera la sangre de mis labios

Lo separé de mi con un fuerte golpe, no lo vi ni nada solo corrí lejos de él y me encerré en mi habitación.

...

Estaba fuera de mi cuerpo el cual se metía con ropa a la bañera habla en serio cuando digo que no estaba consciente de lo que hacía yo estaba en otro lugar en otro mundo.

Mi cuerpo se hundió mis ojos nublado todo se volvió negro.

Una voz llamaba mi nombre, mis ojos se abrían débilmente ¿Que había sucedido? No lo sabía.

—Laito... —llame cansada y agitada.

—¡Nia! Estas bien... —Dijo para abrazarme yo no entendía nada ¿Que sucedía? —¿¡Te trataste de suicidar!?—¿Que como que suicidar?

—¿A que te refieres?—pregunte confundida.

—Vine justo a tiempo para salvarte de morir ahogada.

—tranquilo no sucedió, todo está bien...—dije para tranquilizarlo.

— ¡¿Como puedo estar tranquilo?! ¡Casi Mueres!—estaba mojado y agitado si me salvo de morir ahogada eso significa que... ¿Me hizo el R. C. P?

—Ya estoy aquí...—Tome su mano y la coloque en mi pecho para que sintiera mi corazón y junte mi frente con la suya tranquilizando su respiración.—Perdoname...—Lo abrace y nos quedamos de esa manera por un rato más hasta que me dormí del cansancio.