≋𝓘𝓥

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Un mes.

Había pasado solo un mes desde la última vez que Aidan vio a su querida Aglaope en aquella playa desconocida. Había guardado su pulsera y la concha que le había regalado con aquel brazalete la puso en una pecera que tenía con unos pocos peces.

La mañana siguiente a la que se había quedado Aglaope a dormir esa noche le tomo una foto justo en el momento en que el sol daba en un ángulo justo para sacar una foto perfecta de ella:
El sol le daba en la cara, pero le permitía abrir los ojos dejando ver lo verdoso de estos mientras su cabello morado brilla y saca una sonrisa dulce.

Esta foto la había impreso en su casa para poder pegarla en diversos lugares donde pudiera verla, como su casillero escolar, el espejo de cuerpo completo en su habitación y la parte trasera de su puerta.

Ahora mismo se encontraba entre los pasillos de aquella escuela mientras cambia algunos cuadernos y libros de su mochila.

--Hola, Gallagher-- lo saludo una chica de cabello Castaño lacio.

--Hola, Tj-- la saludo aún guardando sus cosas.

--No había visto esa foto-- comento observando a Aglaope. --Es linda-- agrego con una pequeña sonrisa --, ¿quién es?

--Una amiga-- respondió cerrando la puerta y encarandola. --¿Qué quieres?-- interrogó un poco serio, pero en el momento en que una a hablar notaron a una chica de cabello largo color morado y con las raíces negras tratar de abrir un casillero que estaba frente al de Aidan, pero sin tener éxito alguno. --¿Quién es?-- indagó pensando en la vaga posibilidad de que sea su amiga y crush del verano.

--No lo sé, creo que es nueva-- contesto viendo a Blake acercarse a ella para ayudarla a abrirlo, finalmente logrando el objetivo buscado y haciéndole plática a la chica.

Tj no dejaba de hablar, pero para él eso no le importaba, lo que le importaba era esa chica con la que hablaba Blake. Hasta que finalmente escucho la campana de la escuela sonar y hacerlo salir de su trance psicológico.

--Aidan-- lo llamo haciendo que la mire. --¿Escuchaste lo que dije?

--Ah, perdón-- se disculpo para negar y buscar a la chica con la mirada, pero solo obteniendo al Talabbis en esta. Cuando no la encontró se decepcionó y su cabeza descarto esa vaga posibilidad, llendose a su salón para tomar clases.

Tenía la esperanza de verla otra vez, de poder abrazar su cuerpo frío, de besar sus labios rosados, de tocar su tersa y húmeda piel. Tenía la esperanza de tenerla con él de nuevo. Por esa razón tuvo una confusión de emociones ese día por ese breve momento en que creyó ver a su amada sirena.

Cuando ingreso a su salón para tener clases no pudo creer lo que veía porque esa misma chica estaba sentada en la última mesa hasta el fondo. Tenía nervios de lo que haría si se acercaba a ella tan de repente. Pero al ver qué su profesora se acercaba al salón decidió sentarse junto a ella, aún que ninguno dijo nada durante toda la clase.

Hasta que esta termino.

--Oye-- la llamo Aidan. --Quería preguntarte tu nombre, es que en la mañana te ví y me dió curiosidad-- confesó, pero no obtuvo ninguna respuesta. --Yo soy Aidan, Aidan Gallagher-- se presentó para ver si ella podía decirle su nombre. A pesar de que el salón ya estaba vacío, ellos seguían ahí dentro.

--Aglaope-- contestó la chica con la dulce voz que poseía haciendo que él corazón de Aidan salte de alegría. --Aglaope Prince-- dijo para mirarlo a la cara con una sonrisa y teniendo su mochila sobre su hombro.

--Es bueno verte, Agla-- comento el chico para extender sus brazos y hundirse los dos en un cálido abrazo.

La alegría era lo que ambos sentían. Eso era lo que les faltaba para que su corazón no estuviera triste de nuevo. Con su reencuentro se sintieron más dichosos de la vida.

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⏰ Última actualización: Sep 19, 2023 ⏰

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