Izuku: El Ghoul con humanidad

Capítulo 74: Pocas opciones...

En U.A.:

Vemos como el chico estaba sentado en la cama de Himiko mientras que veía hacia el suelo, notando el largo charco de sangre que se formaba de él. En su cuerpo se podría ver marcas de dientes, cortadas, golpes y marcas de dedos al rededor de su cuerpo, pero por alguna razón, a diferencia de antes, en aquellos 4 meses, este estaba consciente de ello y...¿Lo aceptaba?

No era eso...ya que siempre se decía en su cabeza que no quería sentir más dolor, pero no tenía el valor de decírselo a la chica porque sabía que esta se enfadaría con él y la verdad, solo quería verla feliz, sentía que no soportaría el verla enfadada o devastada...sería demasiado para su cabeza...pero...no le gustaba esto...y si no le gustaba, ¿Porqué tenía que hacerlo?

- Claro...por ver a Himiko feliz...sin embargo, no le gustaba esto...

Este daría un largo suspiro para ponerse su ropa, la verdad, no le molestaba que esta se manchara de sangre porque, quería estar vestido...le incomodaba estar desnudo. Al ponerse de pie y terminar de cambiarse, vio hacia la cama en donde estaba Himiko dormida, quien tenía una sonrisa leve en el rostro algo que hiciera al chico que su sacrificio físico "valió la pena"

"Te haré feliz...Himiko, te ayudaré como quieras...", dijo este en su cabeza, dándose fuerzas a seguir con esto que le dolía, pero el pensar en eso, hizo que se sintiera reconfortado. De una manera rápida, este le daría un corto beso en la frente a la dormida chica, notando su rostro pacífico, como el de una niña feliz, algo que le gustaba, pero ¿Qué más le gustaba de todo esto?

Era una de las pocas preguntas que se hacía para luego dar un largo suspiro de decepción de no poder responderse con seguridad todo lo que tenía en mente. Este empezaría a caminar hasta donde estaba el balcón y con sus kagunes empezó a subir hasta donde estaba el techo de las instalaciones de U.A., en donde vería la ciudad nuevamente...aunque, había algo extraño...

Al ver hacia al frente, pudo notar como muchos edificios habían desaparecido, ya no estaban en el lugar en el que solían estar, como si hubieran sido derrumbados. "¿Qué ha pasado allá?", se preguntó el muchacho mientras que tenía una mirada un poco preocupada, era como si la misión de los héroes, habría salido terriblemente mal...

Al momento de pensar en eso, daría un largo suspiro, sacudió su cabeza y trató de evitar pensar en cosas mala, seguramente solo era su paranoia. "N-No...mejor, piensa en otras cosas mejores, e-en cosas que te gustan...", se dijo este con una pequeña sonrisa esperanzadora, empezando a recordar todo en su vida, desde que era niño y recordó que todo lo feliz...duró un poco...

¿A qué se refería con eso?...pues, sus padres murieron a una temprana edad y lo dejaron solo para que sobreviviera y sí...luego vino uno de los mejores momentos de su vida cuando vivió con Katsumoto, su padre adoptivo quien al final, murió de cáncer al pulmón y volvió a quedarse solo, sin embargo, en ese tiempo tenía a Fumiko y Kiyoshi...

Aunque, a pesar de eso, Fumiko era molesta y los demás Ghouls no lo dejaban en paz porque querían que sirviera de lleno a su causa, pero este no quería, porque sabía que no toda la sociedad era una mierda, no solo por unas pocas personas, juzgaría a todas y eso lo sabía gracias a que conoció a su padre adoptivo...

Luego...rescató a Himiko de las calles y la crio como si fuera su hermana...le compró ropa, le dio un techo donde vivir, comida, estudios...era como su hija...sí...uno de los mejores momentos de su vida porque la quería como su hermana, nada más que eso...

Después...se enamoró, se enamoró como nunca creyó de una chica de cabello castaño corto...su amiga, Ochacco, algo que lo hizo feliz en ese tiempo, sin embargo, nunca supo que tan rápido la felicidad se le podría terminar por querer hacer algo bueno, porque...toda su vida se le fue a la mierda por pensar que podría hacer algo bien por los Ghouls y humanos...