Los suaves quejidos en la habitación eran la música de aquella tarde, donde dos chicos probaban algo que nunca habían experimentado, llenos risas entretenidas y sonrojos notables por el sudor de sus frentes.
- Oye, más despacio - le reprocha el albino, golpeando levemente su hombro.
- No es mi culpa que no seas bueno en esto - responde con un sonrisa en su rostro.
- ¿Y tu si? - dice haciendo un puchero, recibiendo una risa en respuesta - Eres lindo cuando te ríes.
- No digas esas cosas que me enamoro - responde sarcásticamente - Ando soft, primer aviso.
El peliblanco se ríe con ganas, haciendo reír también al peliverde, ambos se miran de reojo, sus rostros levemente sonrojados y un poco de sudor bajaba desde su frente hasta su cuello.
- No lo hagas si no quieres - pronuncia suavemente, acariciando la mejilla contraria.
- Pero quiero hacerlo, además, es muy fácil - con seguridad, toma aquel objeto entre sus manos - ¿Confías en mi?
- ¿Tengo alguna otra alternativa? - responde, haciendo reír al chico - Hazlo.
- No necesito tu permiso para hacerlo - le exclama, apretando aquello entre sus dedos y moviendolos rápidamente.
- Eres muy bueno en esto, ¿seguro no lo has hecho antes? - la impresión en los ojos fucsia hacen sonreír con orgullo al peliverde.
- Creeme, es la primera - pronuncia con voz ronca y llena de alegría.
Ambos mirando con determinación y euforia la pantalla, aplastaban los botones del control para que sus personajes se movieran. Gyutaro iba en la delantera, burlándose del chico albino que no se dejaba vencer, aunque al final quien ganó fue el peliverde. Y si, efectivamente era la primera vez que jugaba a eso.
- ¡Gane! ¡En tu cara! - le señaló, dando saltitos mientras se reía con alegría.
- Si, eso fue impresionante - le dice con una sonrisa, parándose junto al chico para darle una caricia en su cabello - ¿Tienes hambre? Puedo pedir algo, no se, ¿pizza?
- Es una buena idea - le responde, dejándose dar mimos por parte del albino.
Ambos chicos habían quedado en verse antes de que las vacaciones empezarán, pues Tengen se iría de viaje juntos a los chicos a la playa, y no es que no quiera invitar a Gyutaro y su hermana, de hecho lo hizo. Y gracias a eso, se entero que a los chicos no les agrada el calor del sol, preferían mil veces estar envueltos en las cobijas mientras bebían café en una tarde nevada.
Así que decidió invitarlos a su casa a pasar el tiempo, pero sólo Gyutaro fue, afirmando que su hermana ya tenía otros planes y que le agradecía por la invitación, pero que no podría ir.
Y ahí se encontraban, jugando videojuegos mientras apostaban cosas pequeñas, como un helado o una salida al cine.
Era obvio que ese no era el objetivo del albino, el quería invitarlo a otro lugar y aprovechando que sólo vino él, no estaba dispuesto a dejar pasar esa oportunidad.
- Oye, ¿no quieres mejor salir a comer? - le dijo antes de pedir su domicilio.
- Bueno, no es mala idea - le dice levantándose de su puesto y sacudiendo su ropa - ¿Vamos?
- "¿Así de fácil?" - se preguntó internamente, sonriendo para el chico y acercándose - Dejame traigo una chamarra y nos vamos.
- Claro - le respondió, no tenía nada mas que hacer después de todo.
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Dime algo lindo
FanfictionAkaza y Gyutaro son amigos desde hace tiempo, sin un interés amoroso por las personas desde que sufrieron varios acontecimientos a lo largo de su vida. Pero, ¿qué pasa cuando dos hombres que son todo lo contrario a ellos llegan a sus vidas? ¿Podría...