Parte única

238 37 3
                                    

14 de febrero.

Día feliz para algunos, día triste para otros.

Iruka en verdad no sabía qué tal había sido ese 14 de febrero, pero definitivamente el peor en su vida hasta el momento.

¿Que había pasado?

Fácil, su ex pareja lo había dejado ese mismo día, un 14 de febrero, cuando él ya les tenía un día planeado juntos.

Y en verdad ya tenía muchas sospechas de su relación, pero había preferido ignorarlo.

El hilo rojo aún no se había mostrado.

El hilo rojo solo se vuelve notorio cuando por un tiempo cuando este mismo piensa que es el momento correcto.

El hilo rojo... ese que podría hacerte feliz y ponerte mal a la vez.

Y es que Iruka siempre había deseado saber quién sería su hilo rojo.

Juraba, o más bien, quería pensar que su ex pareja sería su hilo rojo.

5 años; 5 años de relación y el bendito hilo nunca había hecho aparición.

Finalmente, su ex pareja le había llamado en la mañana, con él recién levantado, diciéndole que no podían seguir juntos porque había estado saliendo a escondidas con alguien y resulta que era su hilo.

¡Que suerte le daba la fecha!

Se sentía ido, realmente la ruptura lo había dejado tan en shock que no lloró, al menos no hasta luego de bañarse, arreglarse, desayunar y salir hasta el parque al que acostumbraba ir cerca de su apartamento.

Se sentó en una banca frente al lago bajo un árbol y fue hasta en ese momento que logró sentir las lágrimas bajar por su rostro.

Lloró, lloró porque ni el mismo sabía que sentía en ese momento.

Estaba tan metido en sus pensamientos y pensando en sus propias emociones que no notó cuando cierto peliplata se sentó a su lado.

⁃ ¿Por qué lloras en un día como hoy? - entonces ambas almas solitarias se unieron, dando paso a una charla agradable entre ambos, donde la paz y la calma reinaba entre ambos.

Hablaron por horas, hasta las 3 de la tarde, donde ambos notaron que tenían hambre y fueron juntos a comer.

Se sentaron juntos, ordenaron su comida y cuando esta llegó iniciaron a comer, todo entre charlas y risas contagiosas.

Iruka se sintió lleno por dentro, porque con ese desconocido había sentido más cosas de las que había sentido en 5 años de relación.

Entonces ambos cayeron en cuenta que de todo, no se habían preguntado los nombres.

Se sentían tan en paz y tranquilos con el otro que el nombre no les había parecido lo más necesario.

Por sobre la mesa, inconscientemente tomaron sus manos y el peliplata soltó:
⁃ ¿Cuál es tu nombre? - Los ojos de ambos se encontraron y como si se tratara de personas que se conocían y amaban hace años, brillaron.
⁃ Iruka Umino, ¿que hay de ti?
⁃ Kakashi Hatake, un gusto.

Y como si de viejos amantes se tratara, se sonrieron, una sonrisa llena de amor hacia el otro, porque en ese momento ambos se sentían llenos.

Y quizá la presentación había sido el último paso en su introducción, pero había sido el primero en la vida que les esperaba.

Con las manos entrelazadas lo notaron, el hilo
rojo se hizo presente en las manos de ambos.

Y finalmente, ese 14 de febrero fue el mejor día en la vida de ambos.

—————

Disculpen lo corto que es, pero en verdad no los quería dejar sin contenido para hoy.
Espero hayan pasado un buen día y los quiero mucho. <3

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 15, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

14 de febrero (kakairu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora