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Mira hacia adelante como Peter conduce concentrado. Eran las dos de la madrugada y las calles estaban demasiado despejadas, eran de los pocos que andaban a esas horas, algunos salían de fiesta y esta vez ellos iban a urgencias.

— El pediatra de Francia no está de turno – se asoma hacia la parte delantera.

— entonces vamos a otro lugar.

— oye, no tienes que molestarte, puedo llamarle a Grabriel y que me diga que hacer...me dijo que le avisara cualquier cosa.

— el que era pediatra de mi sobrina está de turno, te llevaré con él.

– Peter no....

— sin reclamos Laura, no dejaré que esperes hasta la mañana, luego le das los papeles al pediatra de Francia.

Laura no dice más, sabia que ya no ganaría en ello y solo se concentra en sostener la bolsa cerca de Francia para evitar que esta vez ensuciara el auto de Peter. Seguramente limpiar unas fundas así no iba a ser simple y mucho menos con el amor que sabia que Peter le tenía a sus autos algo que había rescatado con lo poco que sabía de él.

Peter es quien toma a Francia entre sus brazos y Laura carga la mochila con sus cosas mientras entrar a una clínica, porque si, con solo ver la entrada sabia que le saldría demasiado esta consulta y ya se estaba arrepintiendo de no haber llamado a Gabriel.

— hola, en que te ayudo? – dice sonriente la chica del mesón hacia Peter.

Laura arquea una ceja. En los centros de salud pública o la clínica a la que iba solían ponerle cara de agotamiento siempre que entrabas.

— quiero una consulta pediátrica de emergencia, ojalá con Sergio Ferrán.

– bien – teclea unas cosas y asiente — esta de turno, le avisaré, necesito que llenes el registro con los datos de tu hermosa bebé.

Peter asiente y se gira para ver a una Laura muy seria junto al mesón.

— aquí tienes - vuelve a mirar a la chica que le entrega una tabla con una hoja.

— yo los relleno – Laura toma la tabla y el lápiz y la chica asiente.

Pone los datos básicos de su bebé y los síntomas que ha presentado durante el día y le devuelve la tabla.

— bien, pueden ir al cuarto piso, es el de pediatría sus datos estarán ingresados, solo deben esperar a que llamen a la niña.

– gracias – Laura sonríe y comienza a caminar hacia él elevador seguida de Peter que parece divertido. — no se a que lugar me trajiste, ¿sabes? Sacar provecho de mi bebé no es bueno.

— yo? – asiente. – porque lo dices.

— la chica te estaba coqueteando y te vez más guapo con una bebé en brazos.

— gracias supongo — rie y Laura le da un codazo divertida a lo que él le guiña un ojo.

Una vez que el elevador se abre, ambos salen y solo ven a dos parejas con sus niños en la sala de espera.

Se sientan en la última fila y mientras Peter sostiene a Francia en sus piernas Laura comienza a hablarle a la niña para evitar que llore cuando un bebé comienza a hacerlo.

— ¿porque todas las mamás hacen caras cuando hablan con sus hijos? - laura lo mira.

– oye, debes entrar en personaje....además tu también haces caras.

– claro que no.

— es lo que crees, cuando la tenías y yo hablaba por teléfono te estaba mirando, también hacías caras, de seguro lo hacías con tu sobrina también.

¿Por qué Tardaste Tanto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora