Sangre de Sirena

Capitulo 6

Antes de que leyeran el capitulo queria comunicarles eso para que no se enredaran como con el de Syra

Pronunciacion de Saitirid: SHEITRID

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Estaba durmiendo tan plácidamente que la insistencia de alguien para despertarme me parecía totalmente irritable. No quería despertar y salir de mi letargo, pero muy bien sabia que este sujeto no me dejaría en paz hasta cumplir su objetivo así que de mala gana abrí los ojos y lo miré con el ceño fruncido a lo cual le saqué una sonrisa divertida al sujeto de cabellos oscuros

— ¿Te encuentras bien?—preguntó mientras se acercaba y se sentaba en posición de indio, cuidando de no maltratar su maltrecho hombro

Observé el ambiente donde nos encontrábamos. Se trataba del interior de una cueva marítima. Era bastante oscuro, pero gracias al hoyo que había en el techo de dicha cueva entraban los rayos lunares que caían sobre el pequeño estanque—única salida de aquella—dandole un toque místico al lugar.  

— ¡Jaspers!—Me erguí rápidamente— ¡No puedes dejar que tu hombre se soldé en esa posición!

—No es nada, no te preocupes

— ¿Qué te sucede?—pregunté hastiada por la actitud que estaba tomando últimamente ese chico. Primero lo que sucedió en su casa por querer hacerse el macho y ahora no le iba a prestar atención a su hombro dislocado por querer hacerse el fuerte. ¡En serio, que exaspera!

—Pensé que me darías las gracias luego de eso...no que te pondrías así—Se masajeó la sien

— ¿Puedes entender que no estoy acostumbrada a este tipo de actividades? No puedes pretender que no esté en shock luego de esa pelea con esos trasgos. Entiéndeme por lo menos esta vez, ¿Puedes? —Me levanté molesta, no tenía a donde ir en esta pequeña cueva. Decidí sentarme cerca del estanque, de esta forma le daba la espalda al chico que me había salvado la vida

No había pasado más de dos minutos antes de que sintiera como una presencia se acercaba a mí por la espalda y me pidiera disculpas por haberme tratado así, alegó que  saber que mi vida corría peligro constantemente no le ayudaba a mantenerse en control. Sin embargo, todavía eso no me convencía completamente porque no era razón para actuar como un cretino

—En serio, discúlpame—Se agarró fuertemente el brazo cuando le traspasó un escalofrío por todo el hueso. Quiso gritar, pero apretó la mandíbula para que ningún sonido saliese de su cavidad bucal

—Déjame arreglar eso. —Me levanté y me posicioné—Esto te va a doler, solo respira

— ¿No me mentiras como los....—lo interrumpió el grito ahogado de dolor que salió de él. Le masajeé  el hombro antes de comentarle que ya había hecho mi trabajo—Gracias, Syra.

—Nunca pensé que esas criaturas de verdad existían—le dije mientras me sentaba cerca suyo.

—Hay cosas peores, créeme—respondió sin quitarle la vista al agua— ¿Recuerdas esa vez que yo te conté que había gente que me hizo irme porque de lo contrario te matarían frente a mi?

—Sí, lo recuerdo. Fue la misma noche en que te volví a ver después de dos años de ausencia

—Ellos no salieron de la nada...ellos no son los únicos que te quieren ver muerta—Tomó mi mano y con su pulgar me hacia cariño—A mi me quieren muerto por traición y a ti por ser la elegida.