Un amor de infancia.

Capitulo 21

Nueva actualización y antes de que sigan...advertencia. Lo siguiente es contenido para +18.

"Solo relajate Stiles, iré lento." Susurro en su oído sacando sus dedos de su entrada con lubricante, Stiles levantó las caderas al sentir como la punta del miembro de Derek tocaba esa zona.

"Yo...tengo miedo Derek." Contestó nervioso, bajando la mirada a la entrepierna del moreno.

Sonriendo un poco levantó su mentón con sus dedos "Está bien, tranquilo." Beso sus labios "Todo esta bien." Tomó su mano entrelazando sus dedos. Mordiendo su labio inferior logro sacarle un gemido que fue lo que necesito para meter la punta de su miembro, Stiles jadeó sin separarse de sus labios.

"Derek" nombró al sentir como entraba más dentro de él, ardía en su interior cada vez que se abría camino dentro suyo. Nunca hubiera imaginado que se estaría entregando así a su mejor amigo, luego de descubrir sus sentimientos por él.

El alfa jadeó apretando su agarre en sus manos, el interior de Stiles se sentía tan bien, apretado y húmedo. Acarició sus pezones con su mano libre, las marcas de sus besos adornaban su aterciopelada piel blanca llena de lunares. Siempre había deseado tenerlo así. Solo para él y nadie más. Subió la mirada a sus ojos cafés que le miraban cristalizados, beso sus párpados y mejillas.

"¿Se siente bien?" Preguntó saliendo y entrando en él lentamente. Stiles asintió tímido con un sonrojo en sus mejillas. Ver lo inocente que era le calentaba mucho, quería hacer muchas cosas con él.

Paso unos minutos haciendo lo mismo hasta que sintió como se acostumbraba a su tamaño por completo. Tomando sus caderas lo acomodó mejor sobre la cama y se permitió embestirlo como llevaba deseando desde que vio su cuerpo desnudo. Stiles se abrazo a su cuello gimiendo y liberando sus feromonas en toda la habitación, cosa que a Derek le fascinó más y lo insito a penetrarlo más rápido con sus manos bajo su cintura, manteniéndolo en su lugar para seguir con sus movimientos. Todo mientras intentaba callar los gemidos de los dos con besos al tener a sus padres y hermanos en las otras cabañas.

"N-no más..." Cerró sus ojos jalando del cabello azabache. Cada vez sentía que iba más profundo en él y eso lo asustaba, sentía que se volvería loco en cualquier momento "Derek...Derek." el nombrado gruñó al oír su nombre salir de los labios de su castaño. Poseerlo era lo mejor que podía tener.

El sonido que hacían sus pieles chocando lo estaba exitando más y más conforme pasaba el tiempo, pero trato de ir lo más rápido para dejar descansar a Stiles, después de todo era su primer encuentro de los dos y no quería que luego no dejará que lo abrazara. Justo cuando su nudo se estaba formando para unirse a él lo saco, Stiles lo siguió abrazando sin ver cómo Derek se masturbaba con su mano sobre él. Soltó un gruñido al correrse, su semen brinco sobre el vientre y estómago del castaño que sonrió perezoso.

"Joder..." Jadeó dejándose caer a un lado del castaño que se acercó a él de inmediato en busca de su calor.

"Lo siento" murmuró sintiéndose culpable. Había sido su culpa no llevar sus supresores antes de salir de casa, se había olvidado de contar los días por estar tan cómodamente a su alrededor que su celo llegó repentinamente luego de tomar un baño. Derek no había pensado que llegaría a pasarle eso que se vio sorprendido y provocado por las abundantes feromonas y lubricante bajando por sus piernas, termino acorralando su cuerpo sobre la pared, besándolo y mordiendo sus pezones y hombros. Ni ese encuentro detuvo que una nueva erección se formará luego de que su nudo bajara.

"No tienes que disculparte Stiles" paso sus dedos por su cintura hasta su trasero que hizo al castaño soltar un gemido. Sonrió y se puso entre sus piernas de nueva cuenta, con su camisa a su lado limpio su miembro y se alineó en la entrada lubricada del castaño "Es natural esto" dijo en voz baja mirando como su grande se hundía en su entrada de manera deliciosa, abriendo sus paredes.

Stiles miro a otro lado apretando las cobijas con sus manos, gimió al sentirse lleno del moreno.

Si seguían perdería el control y no sabía que podría salir de su boca.

"Mírame Stiles" pidió poniendo sus manos bajo sus muslos para acercarlo a su pelvis más. El nombrado lo miro a los ojos detenidamente, Derek sonrió contento al ver que le obedecía "No sé si me odiaras o no, pero no puedo ocultarlo más" se sentó en la cama haciendo que el cuerpo del castaño quedará a horcajadas sobre él, puso sus manos en su trasero apretando y acariciando delicadamente. Los ojos cafés lo miraba con atención, esperando lo que tuviera que decir, tratando de no sucumbir al deseo que sentía su Omega de moverse sobre él "Me gustas y no de la forma de amigos, quiero que seas mi novio" sus dedos jalaron de su cabello.

"¿Ser compañeros?" Preguntó en un murmuró dejándose caer por completo sobre su hombría.

"A su debido tiempo sí, pero primero te cortejare como lo mereces" beso su mentón al sentir lo que hacía. Su hermoso castaño merecía que lo cortejara como era debido, como solo él lo merecía.

"Pero creo que nos adelantamos en la parte importante" sonrió tiernamente. Era posible que si se habían adelantado en lo que se hacía al concluir el cortejo, pero eso no impedía nada.

"Lo sé" subió sus manos por su espalda hasta sus mejillas "Pero no importa porque estoy seguro de lo que quiero" la felicidad se planto en su interior al escucharlo.

"Me gustas" confesó igual.

El alfa no podía sentirse el hombre más feliz al escuchar a su castaño corresponderle. Pego su frente en su hombro dejando un beso.

"Eres el mejor angel que pude encontrar" murmuró con los ojos acuosos.

"¿Áng..." Cerró sus ojos jadeando al sentir como había sido alzado y bajado por todo el falo del moreno que lo sostenía por las caderas guiando sus movimientos sobre él.

"El mejor ángel" repitió dando estocadas al mismo ritmo que él bajaba, el Omega se sostuvo de sus hombros gimiendo y gritando de placer sin contenerse. Y menos lo hizo cuando los labios del alfa se pegaron a su pezón pocesivamente.

Gotas de sudor fueron bajando por sus frentes y pechos, pasaron cuatro horas dentro de la cabaña hasta que el castaño se desplomó sobre el colchón no pudiendo más con su gran miembro y resistencia, gracias a él su dolor había disminuido al igual que sus ganas de tener algo dentro de él. Derek velo su sueño admirando su rostro hasta que salió el sol. No quería que alguien entrara y viera a su Omega así de desprotegido y dócil.