"Her light went out"
La balanza en este juego del destino es muy frágil, tan solo una pequeña acción, puede cambiar el rumbo de las cosas, ella lograra mantener un poco de luz en su interior, o sencillamente la aniquilara por completo, con realizar...
⁛※⁛ "Pointing fingers 'cause you'll never take the blame like me? And all the people say You can't wake up, this is not a dream" ⁛※⁛
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Artemisa:
Al momento de despertar me di cuenta de que la habitación estaba vacía, mi cama era la única destendida, me costó en un inicio procesar lo que ocurría, pero inmediatamente volví en mí en cuanto vi la hora que era, me había quedado dormida, gracias a Merlín no fue por mucho tiempo.
La situación cobraba sentido al recordar lo tarde que me dormí, con todo lo que sucedió ayer apenas y logré quedarme dormida.
Aun así no tarde nada en cambiarme porque quería al menos poder desayunar algo, las clases se vuelven eternas si las tomas con el estómago vacío.
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Me encontraba corriendo y el cansancio poco a poco se daba a notar, no había hecho tanto ejercicio desde las pruebas para el equipo de Quidditch.
Comencé a desacelerar mi paso en cuanto vi las puertas del gran comedor, aunque decidí detenerme un poco para recuperar el aire.
Mientras el oxígeno volvía a mis pulmones Fred y George salían de las inmensas puertas del comedor... pero a pesar de que los salude mientras pasaban a mi lado, solo me ignoraron, tal vez estaban demasiado concentrados en planear algo, en fin lo deje pasar y después de tanta aventura podría tomar mi desayuno.
En cuanto estuve en la entrada una gran ola de murmullos comenzó a formarse, dedos iban y venían apuntando a mi dirección, me sentía como en alguna de mis recurrentes pesadillas, inclusive verifiqué si es que alguien se encontraba atrás de mí, pero eso no era así.
Busqué con la mirada a Draco, para mi mala suerte él no estaba sentado en ninguna de las mesas, resignada solo empecé a caminar esperando encontrarme con alguno de mis amigos, al ver al trío de oro mi marcha cambio a su dirección.
Pero antes de que llegara a su lado una mano estampo contra mi mejilla, yo estaba a punto de regresar el golpe, si no fuera porque quien me lo dio... fue Ginny, gracias a eso los susurros incrementaron, convirtiéndose en charlas demasiado claras pero por la cantidad de ruido difíciles de interpretar.
La pelirroja comenzó a decirme de todo, yo no lograba responder, se supone que somos amigas, no entiendo que es lo que ocurre... ella me iba a lanzar otro golpe, pero Ron la detuvo a tiempo, sin embargo lo que dijo me dejo pensando.
—Cálmate Ginny, sabes que no vale la pena— El pelirrojo ni si quiera conecto miradas conmigo, era como si no pudiera verme a los ojos, después de eso se llevó a su hermana lejos para tranquilizarla.
Harry y Hermione se acercaron a mí, la castaña me miraba con pena, mientras que la mirada del azabache era indescifrable, a pesar de eso ocasionaba en mi un gran sentimiento de culpa.
