Capítulo 9

639 54 70
                                    

Eloise:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Eloise:

(+18)

Tom cantaba hermoso y yo lo veía embobada, estos días que hemos convivido me ha cautivado. Es un hombre encantador y con un gran sentido del humor. De pronto me beso, su beso estaba lleno de pasión, de inmediato pase mis manos por su cuello para acercarlo aún más a mí.

-Oh, Eloise... - en un rápido movimiento me puso a horcadas sobre el

Ni la falta de aire pudo impedir este beso que he ansiado desde hace días, Tom muy hábilmente empezó a quitar mi camiseta de dormir y quede solo en brallet.

-Dime que deseas esto, tanto como yo - hablaba en mi boca

-Sí, hazlo... - empecé a quitar su camiseta

Me ayudó un poco a quitarle la camiseta y después se levantó cargándome. Puse mis piernas rodeando sus caderas y caminó a su habitación. Cerró la puerta con mi espalda, me recargó justo en ella y no dejaba de besarme.

Baje mis piernas y Tom empezó a bajar el short de mi pijama, sus dedos estaban fríos y erizaban mi piel. Lentamente bajaba sus besos por mi cuello, en medio de mis pechos y por mi abdomen.

Llegó a mi intimidad y sobre las pantis dejaba besos, poco a poco las bajo y puso una de mis piernas en su hombro. Tenía total acceso a mí y parecía disfrutarlo, su lengua no tenía piedad y me llevo al orgasmo.

Tom se levantó cuando noto mi orgasmo y se quitó el pantalón con todo y bóxers. Se acercó a mí y quitó mi brallet.

-No sabes cuánto ansiaba esto - tomo mi mano y me llevo a la cama

Su erección era de lo más grande que había visto hasta ahora, se sentó en el borde de la cama y extendió su mano para que me acercara.

Me senté de nuevo a horcadas sobre él y sostenía su erección para penetrarme. Dude un poco pero ya estaba aquí, no debía tener miedo... solo estoy a punto de cogerme a mi jefe

Moví un poco mis caderas para introducir su erección en mí y tocaba el punto exacto. Gemí y juro que estaba a punto de correrme.

-Que rico - dijo Tom en mi oreja y la mordió levemente

Eso me excito mucho y comencé a moverme un poco más rápido, hice que se recostara y pase mis manos por su pecho. Su cuerpo es tan sexy, parece echo de mármol.

Me incliné y empecé a dejar besos por su cuello y su pecho, sin dejar de mover mis caderas. Tom gruñía en mi oreja y apretaba mis caderas. Me corrí, este hombre me ha dado dos orgasmos deliciosos, me lleva al paraíso.

-Ya me voy a correr... - su voz era ronca

De inmediato me quite, él se masturbo un poco y finalmente se corrió. Fue tan excitante verlo masturbarse y venirse, gimió bajito, pero fue delicioso. Rápidamente se limpió y se abalanzó sobre mí, empezó a dejar besos por mi cuello.

Do me a favour Donde viven las historias. Descúbrelo ahora