One-Shots ~SeroMina~

Te Volveré A Ver

Au sin quirks
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Una chica se levantó de su cómoda cama para sonreírle al resplandeciente sol que se asomaba por su ventana. Eran las nueve de la mañana. Muy temprano para su horario habitual.

Sus cabellos teñidos de rosa estaban más alborotados que de costumbre, incluso más que su amigo Izuku Midoriya. Pero a ella le da igual, se levantó de su cama y fue directo al baño. Lavo su cara y se miró en el espejo.

Un recuerdo llegó a su mente.

Hace tres años

Una chica morena terminaba de lavar su cara, sus ojos, boca y frente estaban siendo secados por una toalla de tela.

Sintió unos fuertes brazos tomando si cintura y un mentón se posó en su hombro izquierdo. Quito La tela de su rostro y mirando al espejo sonrió.

—Buenos días Queen—el chico detrás de ella le sonrió y le dio un beso en la mejilla.

El no tenía puesta su camisa, por que era obvio que su chica la tendría puesta después de su movida noche.

—Buenos días Han-Han—dejó la toalla en el toallero y posó sus manos morenas en los brazos de porcelana que la rodeaban.

Dio media vuelta y está vez posó sus brazos detrás del cuello del chico, el no movió las suyas de su cintura. Ambos sonrieron y se dieron una dulce beso mañanero.

Terminó su recuerdo y tocó sus labios. Hace mucho tiempo que no recibían atención.

—Ya llegará el día—sonrió nostálgica.

Su estómago comenzó a rugir fuertemente. Tenía hambre. Salió del baño y se dirigió a su ropero, tomó el conjunto de una falda de mezclilla azul, una ombliguera amarilla pastel con unas letras rosa que decían Alien Queen, unas medias de rejilla, una licra debajo de su falda y unos tenis marca converse color negro y blanco.

Feliz con su atuendo fue a la cocina de su departamento. Se cocino unos panqueques, al emplatarlos los decoro con leche condensada encima y unos arándanos junto a unas zarzamoras.

Los puso en la mesa y comenzó a degustarlos cómodamente con un gran vaso de leche con chocolate. Podría tener veinticuatro años pero la leche con chocolate sigue siendo su bebida mañanera favorita.

Al llevar el último pedazo de pan a su boca, justo antes de que estuviera dentro, su tono de llamada comenzó a escucharse. Levantó su teléfono de al lado de su plato y al ver el nombre su corazón se aceleró.

Llamada entrante de Mi Han-Han

Rápidamente contestó y antes de hablar respiro hondo.

—¿Hola?—tranquilamente habló.

Una risa se escucho al otro lado de la línea.

—Buenos días Queen—saludo alegremente su novio.

—Han-Han—su tono era de una loca enamorada.

—¿Cómo ha estado mi princesa?—preguntó mientras se quejaba, parecía que estaba guardando algo.

—Extrañandote, como siempre—sonrió triste mirando a la nada, tocando el collar que Sero le había regalado era un dije con forma de corazón y una foto suya en medio.

—Yo igual, pero, ya casi estaremos juntos—dijo eso con mucha seguridad, pues ahora mismo se encontraba guardando su ropa en su maleta.

—Eso espero, te necesito amor—esa frase toco el corazón de el chico.