Capítulo 02:

725 75 24
                                    

Fue una noche, como siempre dormía temprano y no sabía de la vida de los dos ocupantes dueños del departamento.

Tanjiro dormía como todas las noches en su habitación, su cuerpo torneado solo vestido con unos bóxer negros ajustados, pero esta vez el otro lado de la cama no estaba desocupado, estaba lleno por una mujer que parecía ser Kanao, la misma novia de hace muchos años atrás, desnuda por lo que poda notar por arriba de la sabana que la cubría.

¿Qué más rechazo quería que ver a su amante después de una noche de sexo? Sus hermosos ojos oro fundido se humedecieron, tuvo que llevar su mano a su boca para poder acallar un sollozo desgarrador.

Sus pasos lo llevaron a huir, pero no podía hacer ningún ruido si no quería despertar a los dos ocupantes de la habitación, así que sus pasos suaves solo lograron coordinarse para caminar hacia atrás, no podía quitar los ojos de ese par de amantes, la traición filtrándose en su ser, pero ¿Qué traición? Nunca fueron nada, ¿Había albergado algún tipo de esperanza todos estos años? Si la tuvo murió esta noche, pero ¿Por qué no entraba en estado Subdrop? ¿Su estúpido lado Sub aun no entendía?

Tuvo que hacer algún tipo de ruido porque el bulto en la cama se movió, y la ronca voz de Tanjiro resonó en todo su ser provocando placer puro.

— ¿Senjuro? — aun en la oscuridad pudo ver los grande ojos amatista de Tanjiro grandes y asustados.

Senjuro negó, incapaz de producir palabras, cuando llego sus pies inestables llegaron a la puerta, se obligó a dar media vuelta y correr hacia su propia habitación, era lo que se ganaba por regresar, nunca debió volver.

Antes de poder llegar a la puerta de su habitación, algo o más bien alguien lo tomo fuertemente de la muñeca, obligándolo a darle la cara a quien lo retenía.

Senjuro golpeo empujando en fuerte pecho de Tanjiro, no necesitaba su compasión, al fin había descubierto lo obsesionado que estaba por él, aunque obsesionado no sería la palabra correcta, eran compañeros predestinados por Dios.

— No es lo que parece Senjuro, ella no significa nada para mi — las palabras se filtraban en su cabeza, no llegaba a comprender nada, lo único que quería era alejarse, huir, resguardarse.

— Suéltame — gruño Senjuro cuando comprendió que Tanjiro no lo soltaría, se sacudió entre los fuertes brazos del Dom.

— No, hasta que me escuches — su lado Sub se derretía por estar en los brazos de su pareja, pero Senjuro solo quería alejarse.

— ¡Suéltame! — grito Senjuro, en su desesperación termino golpeando en la mejilla a Tanjiro fuertemente.

Tanjiro lo dejo ir, mientras Senjuro observaba tembloroso lo que había provocado, ¿Por qué Tanjiro jamás utilizo su mirada? ¿No era lo suficiente bueno para él, como para no infligir su dominio sobre Senjuro?

Con eso rondando en su cabeza, por fin escapo, resguardando su corazón en algún rincón de la habitación oscura.

Senjuro no pudo dormir, por más que deseaba pegar el ojo, nunca pudo, resignado a tener un día de mierda se levantó a la misma hora de siempre y salió a la misma hora.

Deicidio que, por su integridad personal, dejar de lado a Tanjiro, había vuelto por su madre moribunda y cuando la tormenta pasara regresaría a Estados Unidos y dejaría a Tanjiro atrás.

Por el momento lo mejor era ignorar al Dom y tratar de no estar en su mismo espacio, pero como era un idiota, olvido la herramienta de su vida, de su trabajo y lo que lo mantenía cuerdo en sus peores días, sus zapatillas de ballet.

Rezaba que su hermano y Tanjiro ya se hubieran ido al trabajo para cuando volvió, abrió la puerta espiando dentro, sonriendo al no escuchar ningún movimiento.

Inefable⌠TanjiSen⌡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora