DANDELIONS #1 © Jeon Jungkook

4. Noche desolada

Capítulo: 04

Fueron más de veinte personas a las que les pregunté pero todas negaron haberlo visto, hace exactamente una hora que Nube se había escapado y aún no había podido encontrarlo, mi desesperación crecía más y más, necesitaba tenerlo entre mis brazos, no podía estar sin él, no podía estar solo otra vez.

Mi décimo cumpleaños por fin había llegado, salté de la cama para ir con mis padres pero fracasé en el intento, entraron a mi habitación con un pastel mientras cantaban, celebré feliz y al final de la canción, pedí un deseo y soplé las velas con el número 10 formado.

—Cierra tus ojitos, tenemos una sorpresa para ti
—Dijo mi madre, asentí frenéticamente cubriendo mi rostro con mis manos.

—Puedes abrirlos ahora —habló mi padre, lentamente retiré mis manos para observar mi sorpresa, era un cachorro.

Una pequeña bola de pelo blanco que agitaba su cola rápidamente, miré a mis padres sorprendido, había sido mi deseo desde que tenía siete años, solo quería no estar solo cuando iban a trabajar, aunque estaba la señora que me cuidaba, pero era demasiado aburrida y demasiado vieja para jugar conmigo, iba a hacer un gran cambio en mi vida.

—Jungkook, está esperando un abrazo de su nuevo amigo —Lo tomé entre mis manos acercándolo a mi cuerpo, estaba tan emocionada que su cuerpo se movía de un lado a otro debido a su cola.

Ese día había conocido a quien sería mi mejor amigo por el resto de nuestras vidas, le prometí que nunca me apartaría de su lado en cualquier circunstancia, estaríamos juntos hasta el final, pero había cometido el error de dejarlo solo por unos momentos, de no verlo por estar concentrado en mis pensamientos.

Lo único que me llevaba ahora era su correa, caminaba lentamente buscándolo por el vecindario pero cada vez que me acercaba a casa y no lo encontraba, me detuve a una cuadra de llegar, había decidido regresar, yo no volvería a casa, no importaba que la noche cayera, iba a seguir buscándolo hasta tenerlo conmigo de nuevo.

Me di vuelta caminando en dirección al parque, recorrería todas las calles y preguntaría a la mayor cantidad de gente posible cerca de esas zonas, Nube tenía que volver.

Las horas pasaban, la gente iba y venía, el color del cielo iba cambiando a uno más oscuro, mi cuerpo temblaba por las bajas temperaturas pero estaba más preocupado por el estado de mi pequeño, seguro que está asustado, con hambre y temblando de frío, su diminuto cuerpo no aguantaría las calles y no sabe mucho de ellas.

Decidí volver por un abrigo y mi celular, pensaba seriamente si avisarle o no lo que sucedía a mis padres, quienes estaban de visita en la casa de mis abuelos. No me sentía bien, me siento vacío si él no está aquí, no podría comer si él no me acompaña, no podría dormir tranquilo sabiendo que no está en los pies de la cama, prefería quedarme sentado en la vereda admirando el cielo oscuro de esta noche desolada.

Decidí volver por un abrigo y mi celular, estaba pensando seriamente si decirles o no a mis padres lo que estaba pasando, ellos estaban de visita en la casa de mis abuelos.

Me siento vacío si el no esta aquí, no podia comer si el no estaba conmigo, no podia dormir tranquilo sabiendo que el no estaba a los pies de la cama, prefería sentarme en la vereda admirando el cielo oscuro de esta noche desolada.

Mi celular comenzó a vibrar, la luz de la pantalla me dio en la cara justo en la cara haciéndome cerrar los ojos, era una llamada de un número desconocido, dispuesto a rechazar cualquier oferta que me hicieran, respondí.

— ¿Hola? —hablé una vez que puse el celular cerca de mi oído.

— Hola —Era la voz de una chica, me apresuré a hablar antes de que comenzara su discurso para robarme el dinero.

— Escuche, no me interesa nada de lo que me ofrezca, lo único que hace es robarme el dinero, vuelve a llamar y bloquear-

—¿Eres el dueño de Nube? —Mi corazón comenzó a latir con fuerza al escuchar su nombre.