II

1.6K 108 5
                                    

Hace cinco años

Si bien se sentía afortunada por todo lo que Andrew ha hecho por ella no podía negar que mantener este departamento era algo pesado, se sentía muy grande para ella sola y sabía que la ubicación era excelente para alguno de sus compañeros universitarios, así que aprovecho para dejar colocados unos cuantos volantes por las pizarras del campus en cualquier oportunidad que tenía entre clase y clase.

Delta estaba dispuesta a compartir su piso, en su cabeza ya había hecho una lista mental de que características debía tener su futuro roomie.

Ordenado
Limpio
Que no sea tan heterosexual
Que sepa cocinar
Buen sentido del humor

Creía que esa pequeña lista englobaba la compañía perfecta, que pudieran llevarse bien y que nada se saliera de control.

Los siguientes días estuvo recibiendo mensajes de algunos interesados, pero en realidad ninguna persona le llenaba el ojo, hasta que se topó con una chica y un chico, ambos parecían entrar en esta categoría de buena compañía que ella había creado.

Se encontraba expectante cuando llegó el día de hacer las "entrevistas" empezando con la chica, su nombre era Sarah — Es el nombre de una persona agradable ¿no es así? —quiso relajarse a sí misma.

Cuando Sarah llegó todo iba marchando increíble, hasta pensó en mandarle un mensaje al chico en el que le aclaraba que el lugar ya estaba ocupado, pero pasados quince minutos se dio cuenta que no era la persona con la que estaba dispuesta a compartir los días.

La mujer no se callaba, hablaba, hablaba y hablaba, Delta estaba empezando a sentir punzadas en la cabeza, le produjo jaqueca —No pienso lidiar con ella todos los días— pensó.

De la forma más amable que pudo le explicó a la chica que probablemente no sería ella quien ocuparía la otra habitación que tenía disponible, eso y le inventó una que otra excusa que fuera creíble. Se despidieron mutuamente prometiendo mantener contacto —no le voy a volver a hablar nunca— Aseguró.

Estaba pensando que no tenía la necesidad de estar pasando por esto, que simplemente podía hablar con Andrew sobre conseguir un piso más pequeño y listo aunque eso significara estar un poco más lejos de la escuela, él le ayudaría a facilitarle las cosas.

Tomó una aspirina pasándola con un poco de agua antes de estirarse y masajear su sien.

Quizá el problema es que no soy buena interactuando con personas— se cuestionaba a sí misma, pero negó con su cabeza.— No, en realidad esa chica no era la indicada.

El timbre del lugar la sacó de sus pensamientos y le rogó a lo que fuera o quien fuera que regía el universo que no se tratara de otro loco parlanchin.

Se levantó para atender a quien suponía era el siguiente candidato, abrió la puerta para toparse a un chico vestido con unos jeans y una camiseta ambos negros, su pelo estaba un poco rizado y claramente decolorado.—Tu debes ser el chico interesado en vivir aquí ¿no es así? —Asintió.

Lo guió a los sofás en la sala:—Esta no es una entrevista de trabajo, sólo quiero conocer un poco a la persona con la que probablemente viva así que ¿qué te parece que hagamos de esto una charla casual y listo? Acabo de terminar con dolor de cabeza por la participante número uno, así que si tienes alguna pregunta puedes iniciar con eso.

𝑮𝒐𝒍𝒅 𝑽𝒆𝒍𝒗𝒆𝒕 ~ 𝑩𝒂𝒏𝒈 𝑪𝒉𝒂𝒏 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora