Nuestra historia (Silco y Tú)

Capitulo 24

*Narra Caytlin*

-¿quien rayos eres?- dice una voz dura y seria

En frente de la  celda había una raya de color rojo que señalaba el límite a el que yo me podía acercar, así que me paro atrás de esa línea y respondo a su pregunta

-Caytlin Kiramman vigilante de Piltover,- digo yo presentándome sin recibir respuesta alguna de su partes- revisé tu archivo, no hay registros de ti ni de tus crímenes ¿porque estás aquí?- quería saber quien era y él por qué estaba aquí, puesto mientras que bajaba por el elevador  revisaba su archivo y literalmente estaba en blanco

-Por mi gran personalidad- dice ella

-Atacaste a un preso, ¿por que?

-¿Por que no?- Esa chica me respondía con arrogancia

-Era testigo de una investigación en curso- me empezaba a cansar de esta chica

-Agh que mal- dice ella caminando por toda su celda

-Agh que pérdida de tiempo- ya estaba demasiado cansada como para aguantar sus payasadas, empecé a caminar hacia la salida cuando ella de repente habla

-No pude decirlo mejor, oye dale a Silco  un beso en ese lindo ojo ¿puedes?- dice ella de repente, un nombre eso me podría  ayudar

-Silco. ¿El industrial?- había escuchado de el

-Esta bien ya se volvió aburrido, ¿puedes mandar a quien sea para que me de una paliza y seguir con mi noche?- dice ella

Estaba desesperada por conseguir respuestas así que iba a romper una de las reglas de esta cárcel, pasar el límite de la línea

-¿Esto significa algo para ti?- digo para enseñarle las fotografías que había tomado

De repente ella levanta un poco su mirada y corre directamente hacia la reja de la celda  y estampándose con esta

-¿¡De donde la sacaste?!- dice ella, me exalto tanto que por instinto me hago para atrás

-Mi pregunta primero- digo yo, se veía interesada y tenía que aprovechar este momento- ¿Trabajaba para Silco?

-Dah todos lo hacen, ¿como es que no lo sabes?, ¿En donde encontraste esto?- dice ella desesperada

-Hubo un ataque esta es la evidencia- digo yo para cerrar el cuaderno con la evidencia- Necesito pruebas para creer lo que dices de Silco- no me arriesgaría a creerle a alguien que me dijera mentiras así que necesitaba pruebas

-Podría conseguirlas pero no desde aquí-

Sabía a que se refería, quería que la sacara pero ¿podía confiar en ella?

-¿En qué tipo de mundo confiaría en alguien como tú?- digo yo

-¡¿Alguien como yo?!- dice ella parece que no le agrado lo que dije- ustedes los vigilantes son iguales unos malditos criminales con uniformes elegantes, ¡sabes que encuentra a Silco por tu cuenta!- dice ella

No iba a dejar que me hablara de esa forma- Sabes que eso are gracias- digo yo para empezar a caminar

-El distrito suburbano té comerá viva- dice ella

Sabía que el distrito era peligroso, y para ser sincera solo me podía defender con un arma pero sin ella no podría, estaba contra la espada y la pared, después de pensar y pensar decidí que era lo mejor liberarla