Capitulo 27

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Ya había pasado una hora desde que Jinx dejó la cueva, mi vista  estaba en la entrada de la cueva esperando a que Jinx se presentase ahí pero mientras esperaba hacía unos pequeños arreglos al Hextche sin duda hacerlo sola era más trabajo, mi cabeza me dolía de tanto trabajo sentía que en cualquier momento explotaría las anotaciones del diario de Jayce eran cada vez más complejas estaba agotada después de tres días de esfuerzo para construir esta cosa y las malas noches que dormía aquí no eran nada benéfico para mi

Estaba terminando los detalles del aparato cuando de repente siento un dolor tan fuerte en mi cabeza que hace que caiga al suelo, mis oídos me zumbaban, por un momento mi vista se oscureció  , me recargo en la mesa para tener apoyo y no caerme,  y  de repente todo volvió a la normalidad como si alguien chasqueara los dedos y todo eso desapareciera, pero después de unos segundos empecé a ver que caían gotas de sangre en la mesa, al sentir mi labio superior este estaba empapado de sangre, me estaba saliendo sangre de mis dos fosas nasales y esto era demasiado, creo que por el impacto de hace un rato y la presión del trabajo me salió sangre

Busque por los cajones de las mesas de la cueva, busque en las repisas, en la mesa, literalmente por toda la cueva y no había ningún papel o toalla para detener el sangrado así que tenía que ir a mi habitación por una toalla para detener el sangrado

Caminaba hacia el bar y sentía como la sangre escurría por mi brazo tratando de detener el sangrado, al llegar al bar no había nadie, se me hacía algo raro puesto que los anteriores días el bar estuvo en funcionamiento, ya era tarde como las diez de la noche pero se me hacía raro por que toda la semana habrían, subí las escaleras hacia las habitaciones en la parte superior del bar, empecé a caminar por el pasillo y al llegar a mi habitación abrí la puerta y entre

Las luces estaban apagadas por lo que era imposible ver y al prenderlas veo a Silco sentado en la orilla de la cama con su mirada en  suelo, al notar que prendo las luces me ve con una cara de sorpresa y preocupación

-¿¡Qu-que haces aquí?!- digo sorprendida

Silco se acerca a mi y quita mi mano que detenía un poco el sangrado de mi nariz, se nota con una expresión de preocupación al ver que mi nariz, mi brazo y muy poco de mi ropa estaba llenos de sangre

-¿Que te pasó?- dice el tocando mi nariz

-No se solo empezó a sangrar de repen.....- me interrumpo  al notar que Silco baja su cabeza a la de mi altura y examina mi cara pasando su pulgar por mis mejillas, estábamos a centímetros

-Siéntate- dice él ordenándome a lo que yo hago caso, veo como él entra al baño y segundos después sale con una toalla semi húmeda y me la pone en la nariz, el se inca para estar a mi altura y empieza a hacer un poco de presión en mi nariz para detener el sangrado

Silco y yo solo nos quedábamos mirando el uno al otro

-No te preocupes yo lo puedo hacer- digo quitándole la toalla y volviéndomela a poner en la nariz

Veo como Silco se para de su lugar y se sienta al lado mío, quedamos unos segundos en silencio hasta que él habla

-Vine a decirte que....- lo interrumpo rápidamente

-Por cierto ya empezamos a armar la máquina Hextch Jinx y yo y creo que va muy bi......- el me interrumpe

-No vine para hablar de trabajo, si no de nosotros- dice el volteándome a ver- escucha estuve mal al hablarte de esa manera y no confiar en ti y es importante la confianza en una relación y te pido perdón ______- dice el tomando una de mis manos

Desde que conozco a Silco él siempre a sido un hombre de pocas palabras, muy serio y frío, antisocial y antipático pero cuando me muestra este lado suyo es como si ese hombre desapareciera, y sería bastante idiota reclamarle sus disculpas sabiendo que soy la única persona a la que le muestras sus sentimientos y pensamientos

-Te perdonó- digo para posar mi mano en su mejilla acariciando esta con mi pulgar- y yo también te quiero pedir que me perdones por mentirte y no decirte la verdad- digo yo

-Claro- dice el para darme un abrazo como si de eso nuestras vidas dependiese

-Te amo- digo susurrándole al oído

Él se sorprende y me da un peso muy apasionado y lleno de amor- Yo te amo más- dice el abrazándome de nuevo- entonces volvemos a ser ______ y Silco- dice él como niño

-Jajaja por supuesto- digo para abrazarlo con fuerza

-Te amo- dice eso para darme besos en toda la cara

-Debería quietarme esto- digo quitando la toalla que tenía en la nariz

-¿Ya no tienes sangre?- dice él viéndome la nariz

-No, gracias por preocuparte- digo para seguir abrazándolo

Nuestra historia (Silco y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora