-Siempre fuimos ella y yo- susurró mientras contengo un sollozo- ahora estoy sola.
-Tu mamá eligió estar sola- la voz de Maggie suena rasposa- No tienes porque estar sola. Tienes derecho a conocer a tu familia- mi frente se frunce ante la mención de...
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|CAPÍTULO 11|ACTO UNO|
Cierro mis ojos mientras que aprovecho los rayos del sol los cuales golpean con toda su fuerza al pequeño pueblo de Washington. Hoy es uno de esos pocos días donde no hay un rastro de lluvia, pero a pesar de eso la brisa está presente haciendo que el día se sienta fresco.
Los Cullen no vinieron hoy a la escuela, según los rumores que llegaron a mis oídos el doctor Cullen los lleva a acampar para aprovechar el clima soleado.
En la mañana recibí un corto mensaje de Alice disculpándose por no poder ir hoy a Port Angeles y que la salida quedara pospuesta.
A mi lado se encuentran Ángela y Jessica, estas hablaban entre ellas mientras que al igual que yo se broncean un poco.
-¿Quieres ir Charlotte?- abro mis ojos para mirar a Ángela. Le sonrío algo avergonzada al no saber de que están hablando.- Iremos a Port Angeles al finalizar las clases- lo pienso un poco pero al final termino aceptando. Al fin y al cabo esos eran mis planes de hoy.
-Claro- Jessica fuerza una sonrisa en cambio Ángela me sonríe sinceramente.
•••
-¿Crees que sea adecuado para la ocasión?- Ángela hace una mueca mientras inspecciona su vestimenta en el espejo.
-Si, el vestido es lindo y se ajusta a tu cuerpo- habla Jessica mientras que le da una mirada a Ángela, yo asiento dándole la razón.
-¿Te sientes cómoda con el vestido?- le pregunto y está asiente con su cabeza- Eso es lo importante.- Ángela entra nuevamente al vestidor emocionada. Yo le doy una vista por encima a la ropa, en mis brazos reposan ya varias bolsas de distintas tiendas.
-¿Comprarás algo más?- le doy una mirada a Jessica antes de responderle.
-No, en unos días volveré con Alice por lo que no quiero comprar demás.- murmuro mientras me siento en un pequeño sofá qué hay en la tienda.
-No sabía que eras cercana a los Cullen- no paso desapercibido su tono y él como sus ojos me recorren de pies a cabeza. Me encojo de hombros sin contestarle, la primera vez que vine a Port Ángeles me sentí tranquila y cómoda, en cambio hoy mi incomodad era notoria y esto se debe a las miradas fulminantes de Jessica y sus comentarios innecesarios.
-Me iré antes- murmuro cuando Ángela sale del probador.
-¿No irás a comer con nosotras?- la peli negra hace una mueca con sus labios.
-No tengo hambre, pero podemos salir a comer otro día- Angela me sonríe y asiente con la cabeza.
-Adiós- me despido con la mano y salgo de la tienda dejando a ambas chicas en esta. Hago una mueca al ver como el sol ya se está escondiendo, al parecer el día se fue más rápido de lo esperado. Algunos locales estaban empezando a cerrar y otros empezaban a abrir.
