Capítulo 5

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Los amaneceres en África son otra cosa, son de otro maldito mundo. Majestuosos animales viviendo en su hábitat como debería de ser: libres. Y como Harry no pagó esas vacaciones en vano, pues es momento de despertar a sus cachorras.

–Oigan, ya es hora de despertar. África nos espera, es una hermosa mañana –una ronda de quejas, y pucheros molestos le responden. Sin embargo, el alfa no se da por vencido.

–Abi, ¿quieres despertar para papá amor, por favor?

–En el nombre de Lucifer, déjanos dormir –responde con la voz amortiguada, la cachorra menor.

Louis no está teniendo las cosas más sencillas, sus holgazanes cachorros están renuentes a despertar también.

–Arriba, arriba, arriba los dos. Tengo un gran día planeado -insta mientras abre las cortinas para que entre la luz del sol. Cuando voltea ve a sus hijos usando antifaces para dormir con diseño de leopardo de peluche con esposas a juego.

–Necesito un café –dice con un suspiro y sale de la habitación.

🌈🌈🌈🌈🌈🌈

En la estación de café del hotel, Harry y Louis se encuentran, y las cosas son incómodas.

–Buenos días –dice el omega.

–¿Tienes un gran día planeado? –responde el alfa, mientras toman las tazas para servirse el café.

–Oh sí. Paseo natural a las 7:15. Zoológico a las 8:30. Artesanías a las 10: 00 am. Los chicos están emocionados.

–¿En serio? Mis niñas también están encantadas.

–¿Crema? –pregunta el beta que les servía el café.

–No, gracias –responden al unísono.

–¿Azúcar? –vuelve a preguntar.

–Sí, por favor –vuelven a responder al unísono. Se voltean a ver confundidos. Malditamente raro.

–¿No pudiste despertarlos, no? –pregunta el rizado.

–No. ¿Y las niñas?

–Tal vez estén dormidas el resto del viaje. Y creo que la pequeña necesita un exorcismo. A ver qué pasa –toman sus tazas y caminan apreciando todo.

–Este es un hermoso lugar –señala el omega.

–Estoy de acuerdo –secunda el alfa, cuando voltean a ver a una pareja de rinocerontes follando. De acuerdo, ahí va una imagen que nunca borraran de su cabeza.

–Nos vemos.

–Sí. Que se diviertan –se despide el omega, y sin más cada uno parte a su destino.

🌈🌈🌈🌈🌈🌈

Harry siempre ha sido un gran fan de los deportes, le encanta practicarlos. Fue una bendición y orgullo que su cachorra se mostrara interesada también en ellos. Está jugando básquetbol con Sky, y otra dupla de padre e hijo que conocieron en el hotel.

Él sabe que Sky es pequeña, es delgada también, es una omega. Su complexión es así por naturaleza, pero eso no significa que ella no sea fuerte. Sky es malditamente talentosa y él lo sabe.

Durante el juego, él la anima a que use su fuerza para quitarse al apestoso alfa de encima y poder encestar. Sky termina por empujar lo suficientemente fuerte al alfa hasta derribarlo, usando su cuerpo, bueno su polla, como pequeño escalón para encestar.

–¡Así se hace, Sky! –aplaude el ruloso.

Sky está orgullosa de su jugada, hasta que la ve. Ahí fuera de la cancha, está la alfa de sus sueños. Con el cabello platinado recogido en una coleta, audífonos y ropa fresca, Autumn observa a la omega. Sky no es buena con las alfas, no sabe cómo coquetear, ni verse linda, pero eso no le va a impedir intentarlo.

Luna de miel en familia (l.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora