Diecinueve y veintitrés [Aidan Gallagher] (✔)

15

"_____ Davis"

Luego de almorzar, volvimos a la casa de Aidan. Digamos que me he quedado a dormir allí. Pero obviamente en la sala. En el mueble. 

En casa de Aidan, Hayley estaba pero en su habitación, y Julie fue con ella. 

En el almuerzo no he podido hablar. Y lo bueno es que Aidan había olvidado eso por completo.

Veo a Aidan sentarse y hacer una seña para que vaya con él.

Me siento nerviosa. Seguramente sacará el tema de la playa. Cuando le dije de eso.

Me acerco y me siento a su lado, suspirando

—¿No vas a decir nada?— susurra

—¿De qué?— me hago la tonta— ¿Sobre...? 

—Me gustas, ____— dice mirándome. Mi corazón inesperadamente tiene un pequeño brinco de felicidad o alivio. —Me estoy enamorando de ti...

Enamorando...

De...

Mi...

Abro la boca, sorprendida. Lo miro a los ojos y siento los míos humedecerse. 

«Soy la peor»

Él me sonríe, sonrojado, y toma mi mano para besarla, como costumbre. Siento que me falta todo pero que tengo todo a la vez. Siento mis mejillas húmedas por las lágrimas y Aidan parece sorprendido por mi reacción. Pero no dice nada, simplemente las seca

—¿Lloras? ¿Por qué?— mira mis labios y luego mis ojos, otra vez

—P-porque no te merezco...—digo en un susurro

—¿Por qué no?— suelta una risa, como si fuera absurdo— Sol, te mereces algo bueno. Últimamente te siento tan.. tensa, tan abrumada. Lo que te pasó.. Algo de lo que soy ignorante totalmente, pero aún así puedo notar que hay algo que te hace sentir mal.

—Cariño, yo...—trato de hablar. 

—Escúchame... Todo estará bien. —sonríe de lado— Yo quiero intentar esto contigo. Quiero... Que seas la primera... De todas las formas en que empiece y acabe—pasa un mechón de mi cabello detrás de mi oreja—, primero que nada somos amigos. 

—Aidy...—jadee. Mi pecho dolía mucho. Esto de verdad pasaba en el momento equivocado. Sentía un profundo vacío.

Él me abraza y besa mi sien. 

De manera inesperada, me hala hacia él y termino sentada en su regazo, a horcajadas. Me sonrojo inevitablemente. Sonrío un poco. Quizás si deba... Quedarme... Solo... Tengo que pensarlo muy bien... Todo... 

—¿Quieres intentar esto? Prometo tener un millón de aventuras para que no te aburras fácil de mi. Haré que cantemos algo siempre que se pueda. Solo necesito tu...— se calla y nos distraemos cuando su celular empieza a sonar muchas veces, como si no tuviera fin. 

Frunce el ceño y lo toma sin apartarme. 

Veo como varias notificaciones llegan desde distintas redes sociales, que jamás habíamos compartido. Confundido, él entra al primero que le apareció. Instagram y mi mundo se cae cuando veo lo que es.

Él y yo. 

Una foto

En la playa.

De hoy.

Lo etiquetan demasiadas veces y lo siguen, a tal punto que sus fotos también son reveladas ante millones de personas, así que rápidamente él pone su cuenta en privado. Sin entender nada, sigue, revisando