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"____ Davis"

Cuando llegamos a la playa, ya son las cuatro y veintidós de la mañana, el cielo aún no está aclarándose. Ambos nos paseamos por la parte arenosa y nos sentamos en ella. 

Aidan se sentó cerca mío y suspiró, lo miré y habló

—Te siento triste— musita

—No lo estoy— miento

—Lo estás— insiste. No me mira, tiene la mirada en frente, y puedo ver el lunar que tiene en la mejilla. 

Cuando me voltea a ver, ahora soy yo la que mira al frente, evitando su mirada. 

—¿Por qué de repente me evitas?— dice casi en una burla amarga— ¿Hice algo mal? ¿No te gustó el beso? Sabes perfectamente que no sé nada de estas cosas y...

—No te evito, solo que.... Solo...— no sé ni qué decir, el alcohol en mí sistema aún sigue y no pienso con claridad. 

Bufo amargamente y me acuesto en la arena, mirando el cielo oscuro. Me paso las manos por el rostro, frustrada. No quiero que esta sea nuestra última vez pero lo que siente, y lo que estoy sintiendo no esta bien porque yo no formo parte de su mundo

«Mira que estás pensando con coherencia estando ebria»

Oh, claro que no lo hago porque tengo muchas ganas de decirle tantas cosas.. El me ha dejado entrar en su mundo, me dejó conocer su debilidad, e irme así como si nada... 

Oh, vamos, quiero llorar por pendeja. 

Y eso hago, me permito llorar como nunca lo había hecho. Y creo que no solo lloro por esto, sino que lloro por todo lo que me abruma, lo que quiero ser y no me dejan. No quito las manos de mi rostro cuando las lágrimas las empapan, me siento demasiado débil ahora mismo.

Aidan se acerca a mí y hace que quite ambas manos para mirarme pero volteo el rostro. Eso le frustra, lo puedo notar, pero aún así, apoya su frente en mi hombro.

—¿Qué quiere que haga después de que me besaste de esa manera?— musita, afligido

—Perdóname— lloriqueo.

—¿Por qué lloras?— me voltea el rostro y lo miro, su rostro está a centímetros de mi.

—Porque ya me cansé de ser alguien que nos soy. Amo lo que hago, de verdad lo hago pero todo me tiene abrumada, de sentirme presionada y forzada sin poder hacer nada a mi ritmo, siento que me obligan a hacerlo todo como ellos quieren y no como yo— jadeo— Y perdóname por hacerte esto justamente a ti, de verdad lo lamento....

—No te entiendo bien, Sol. ¿Por qué te disculpas? Si tienes novio y me has besado, entenderé y no volverá a pasar...

—No, no— niego rápidamente— Solo...

—Te arrepientes... De hacerlo...— dice lentamente, como si no quisiera confirmarlo

—Claro que no, me gustó, claro que sí solo que no lo entiendes, es confuso y me vas a odiar, lo digo en serio— sonrío tristemente. 

—Explícamelo, cariño...

Me quedo quieta, lo que dijo no está bien, no lo está. Pero me gustó, me agradó, y se sintió tan natural que no pude evitar apretar los labios, tratando de disipar la necesidad de besarlo.

¿Y si ya le digo quién soy realmente?

¿Me aceptará?

¿Me seguirá viendo igual?

¿No estará conmigo solo por conveniencia?

Me siento correctamente secando mis lágrimas con las mangas de su chaqueta, avergonzada. Lo miro y agacho la mirada. 

Diecinueve y veintitrés [Aidan Gallagher] (✔)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora