Todo en el castillo era un desastre, los sirvientes corrían de un lado al otro cargando cosas para las habitaciones de visita, haciendo que todo luzca maravilloso, pues se debía causar la mejor impresión. Otros empleados arreglaban la sala principal para la cena que se celebraría al anochecer, e incluso si aún faltaban horas, limpiaban un lugar y decoraban el otro. El omega y sus padres llegarían pronto y necesitaban que todo esté perfecto, no debían echarlo a perder antes de empezar.
—Espero que sepas cómo comportarte, Harry —dijo su madre entre dientes—. No podemos arruinar esto, recuerda que debes mantenerte alejado y tranquilo, no puedes tener unas de tus crisis en presencia de los reyes.
La alfa lo miró seria y fingió darle una sonrisa amable cuando algunos de los empleados que estaban en el mismo lugar que ellos empezaron a prestarles atención, porque incluso si odiaba que su hijo sea un beta mudo con problemas de ansiedad, no se arriesgaría a que otros vieran cómo lo trataba y que fueran a contarle a algunos de sus aliados, porque aunque no eran muchos, sí existían reyes betas y ella no iba perder lazos con ningún reino, no hasta ser mejor que ellos.
El chico de rizos asintió, cohibido.
"Me comportaré bien, lo prometo" comunicó moviendo las manos.
Ella rodó los ojos y salió de ahí. Ahora tenía otro problema que solucionar y no era nada menos que un Derek desaparecido, el alfa se había escapado para ir a una fiesta la noche anterior con la excusa de que su vida estaría condenada en las próximas horas. La alfa se encontraba tan furiosa que incluso tomó algunos supresores para calmar su olor a enfado.
Horas después, los invitados llegaron y el alfa también. Él tuvo que ir directo a su habitación escondido para intentar estar presentable mientras que ellos fueron a hablar con la reina. Los empleados llevaron sus maletas a las alcobas que le fueron asignadas a cada uno. La de Louis estaba cerca a la de sus padres y lejos de la habitación de Derek, por petición de los reyes de Barza del Norte.
El verde de los ojos de Harry y el azul de Louis se encontraron, ambos sonrieron. Pero solo uno cayó un poco más mientras que el otro ignoraba aquel sentimiento.
Los tres reyes y dos príncipes (beta y omega porque Derek no estaba presentable aún) se reunieron en la sala principal, la cual estaba decorada con cortinas doradas, sillones oscuros y cuadros de pintores famosos. La anfitriona se sentó en un sillón individual, los invitados en uno familiar enfrente de ella y Harry estaba parado al lado de su madre.
—Es un placer tenerlos con nosotros hoy —habló la reina de Hazzel Kingdom con una gran sonrisa. Él beta asintió con una sonrisa amable, tratando de comunicar que también estaba feliz con la visita.
—El placer es nuestro, querida Miranda —respondió la reina omega—. Esperamos mucho este momento. ¿Cierto, Louis? —preguntó ella causando que las mejillas del mencionado se colorearan.
—Louis estuvo emocionado todo el camino. —Se burló Marlon, el rey de Barza del Norte, arrancando carcajadas en los presentes.
Solo uno de ellos rió incómodo y ciertamente triste, también. El beta solo quería irse de ese lugar lo antes posible. El omega ojiazul pudo sentir su incomodidad como propia, pero no le prestó atención. Era imposible que ellos tuvieran algún tipo de conexión si apenas se habían visto algunos minutos.
Quitando cualquier pensamiento extraño de su mente, Louis se volvió a sentir ansioso, él moría por ver a su alfa. Oh, Dios, eso sonaba tan bien. Y es que, sin quererlo, se había enamorado mediante sus cartas.
—B-bueno...—Empezó el mencionado, tímido de pronto—, es que ya quiero verlo. En las cartas parecía tan lindo que no puedo creer que ahora será mi alfa —dijo con una media sonrisa y las mejillas ardiendo—. S-siempre creí que estaría c-condenado a un matrimonio ú-únicamente político, pero me alegra que no sea así —reveló sin poder controlarlo, se hallaba tan nervioso que podría vomitar ahí mismo.
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Beta - [Larry]
FanfictionCuando Harry se ve obligado a escribirle cartas al prometido de su hermano por órdenes de su madre, la reina, jamás pensó que terminaría enamorado de aquel Omega de ojos azules y sonrisa cariñosa. Harry es solo un beta, mudo y ansioso. ¿Qué podría...