"Así que tu también te enfermas"
Era fin de semana, el verano ya había terminado y daba paso al otoño, el viento comenzaba a soplar llevándose consigo el ropaje anaranjadizo de los árboles.
Después de una ajetreada semana de entrenamientos, tareas y, en el caso de Shoto, discusiones, muchos regresaron a sus respectivos hogares, esperando tener un reconfortante fin de semana en compañía de sus familias. Pero ese no era el caso de el bicolor, él no planeaba regresar a ese lugar que se suponía era su hogar, no este fin, a decir verdad no quería tener que volver a discutir con su progenitor y si podía evitar incluso su cara, seria aún mejor.
Sin embargo tantas preocupaciones, corajes y el hecho de no cuidar de su salud a causa de lo antes mencionado, cobraron factura de la forma que Shoto más odiaba, una gripe que, por su condición era mucho mas extraña que la de cualquier persona; en primer lugar llegaba sin avisar, de la nada su cuerpo se ponía débil y vulnerable, al grado de perder la fuerza incluso para caminar, sus quirks sufrían un desequilibrio y de momentos su temperatura bajaba de forma alarmante o subía demasiado lo cual resultaba terriblemente molesto, su cuerpo dolía mucho pues su mitad caliente no estaba acostumbrada a ese frío tan intenso y su mitad fría sufría ante tanto calor. Hace mucho no le sucedía pero al parecer esta vez se había excedido demasiado, y para colmo de males ni siquiera estaba acompañado, "salir solo a caminar por las áreas verdes de la UA no fue la mejor idea del mundo", se regaño internamente. Sin poder pedir ayuda comenzó a perder el equilibrio y cayó, el viento, aunque ligero, le dolía y cerca de un árbol solo pudo quedarse temblando por el dolor que le provocaba su descontrol. Por un momento creyó que moriría hasta que casi como un milagro escuchó a alguien cantar, pudo reconocer aquella voz gruesa y ronca, sonaba diferente a cuando hablaba/gritaba pero sin duda era el.
–"Luchas tan sucio pero tu amor es tsn dulce, hablas tan lindo pero tu corazón tiene dientes. Demonio de la noche, pon tus msnos en mi y no me dejes ir"– (Teeth-5 seconds),
El rubio de ojos escarlata llevaba audífonos y cantaba despreocupado mientras se movía un poco al ritmo de la música, esa canción le gustaba mucho.
A Shoto le habría encantado poder disfrutar un poco más de aquella escena, ver y escuchar a Bakugo así era algo nuevo, curiosamente sonaba y se veía muy bien, parecía que la música sacaba un nuevo lado de él, uno que más relajado y... ¿Hermoso?, amm no sabía, después de todo estaba muriendo en el suelo y tal vez ya tenía alucinaciones, aun así como pudo llamó la atención del rubio.–Pero que mierda!?
El rubio se exaltó mucho cuando una pequeña piedra logró captar su atención, y buscando al responsable de tan estupida acción, (según el), sus ojos se toparon con los del bicolor los cuales parecían pedir ayuda.
–Bastardo que te pasó!? Hay villanos!? Quién te atacó!?
Bakugo estaba exaltado, y mientras ayudaba a Todoroki a reincorporarse, buscaba con la mirada a quien podría haber dejado así al bicolor.
Mientras tanto, con la poca fuerza que aún le quedaba Todoroki intentó hablar.–T-tengo mucho f-frio, estoy resfriado.
Y así Shoto comenzó a desvanecerse, sus ojos lentamente se cerraban y su temperatura descendía cada vez más, entonces Bakugo se alarmó de verdad, pues por un momento creyó que su compañero enserio moriría, así que sin pensarlo mucho se desprendió del abrigador polo negro que llevaba y con cuidado se lo colocó al bicolor quien solo llevaba una camisa, delgada pero suave y esque el clima a el realmente nunca le había afectado. Una vez el bicolor sintió el calor de aquella prenda que aún tenía un poco de la calidez del rubio, se reincorporó un poco pues ya no tenía tanto frío, además el polo tenía un agradable aroma.
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Heather - TodoBaku
أدب الهواةAun no era invierno, pero el frío del viento otoñal le daba pequeñas y dolorosas punzadas a mi corazón. (...) Tal vez no era el frío lo que hacía que mi corazón doliera, si no el verte sonreírle a ella. Los pers...