[03]

91 13 9
                                    

El viaje iba a su dirección, tranquilamente. Asomando mi cabeza por el vidrio de la ventana, noté que el clima era soleado y no parecía que fuera a llover.

Me recargue sobre mi asiento soltando un suspiro de satisfacción, a mi lado, un chico de pelo albino y piel pálida intentó hacer una conversación conmigo.

— No creó que llueva en todo el día, es un alivió ya que a veces me cuesta descansar en plena lluvia.

Se dirigió a mi, con una sonrisa relajada mientras observaba un folleto. Era algo extraña su presencia, sin embargo, estaba obligada a responder.

— En lo personal, me asustan mas las tormentas.

— Vaya... No tenía idea de eso, señorita Toshiko, pensé que te conocía bastante bien.

Al escuchar el tono en el que mencionó lo último, pude reconocer mejor la voz de Komaeda.

De todos mis amigos, el era con el que menos hablaba, mas que nada por dos razones.

Una era lo aveces “extraño” que puede ser, diciendo cosas que incomodan constantemente, o alagando de una manera exagerada a los individuos que estén cerca.

La otra razón era precisamente por que Byakuya pedía que tomará distancia con él, nunca me dio una explicación más allá de que no pertenecia a nuestra clase.

Pero Byakuya no estaba aquí en estos momentos.

Durante el vuelo, tanto Komaeda como yo hablamos e hicimos preguntas para que el tiempo pasará más rápido, y así fue.

A diferencia de como muchos lo veían, es alguien cariñoso y amable si sabes como tratar con él, como es mi caso.

— Agradecemos su viaje, retirense por las compuertas de atrás, gracias.

Luego de hablar un poco de nuestras vidas fuera de Japón, Komaeda y yo bajamos, este último me tocó el hombro y me paso un papel con su número.

— Escucha Toshiko-San, si necesitas algo o quieres conversar de nuevo, puedes llamarme y yo con gusto aceptaré.

Observé el papel, asintiendo con lo dicho por el albino, después de separarme de el camine hasta donde ya se encontraba la pianista, saltando y siendo “discreta”, claro, con un cartel que decía “BIENVENIDA, ____”

Al acercarme, Kaede me dio un abrazo realmente grande y correspondí, agradeciéndole bastante su ayuda, también pude sentir la mirada de Komaeda mientras se marchaba del aeropuerto, me sigue pareciendo raro...

____________________________________

— Tu no te preocupes Toshiko-San, igual no es como que mis padres se molesten si estas aquí.

— Lo sé pero, no puedo evitar sentirme nerviosa respecto a vivir como si nada en tu propia casa.

— Descuida, igual siempre quise sentir como es vivir con otra chica de mi misma edad, algo así como si fuéramos hermanas.

La forma tan dulce en la que me respondió Kaede me hizo sentir confiada. Durante ese día me encargué de desempacar todo de mi maleta, varias cosas que sentía que sin ellas vivía.

Akamatsu-San, ¿tu sabes algo del resto?

— Bueno, de Sonia solo se que se encuentra en Novoselic, con su prometido Gundham, Celestia aún esta apostando para ir a vivir su sueño tan deseado, Kokichi no se donde vive pero creo que esta bien y Nagito pues...creo que falleció alguien cercano a él, no me explicaron del todo bien.

La sonrisa que tenia en mi rostro se contrasto al escuchar a Kaede, no pensaba que algo así llegará a sufrir Komaeda y sin más actuará en el avión como si no pasará nada-

Togami, pues, creo que esta comprometido con una chica, no me acuerdo de cual es su nombre. El caso es qué, de la nada el cascarrabias acabó siendo la persona mas feliz del mundo.

Miré preocupada a Kaede, ella al notarlo se acercó a consolarme.

— Lo lamento Toshiko-San, además, Togami esta súper ciego, capaz se esta casando con un cástor con peluca y aún no se da cuen-

Desde la puerta de la entrada, se escuchó como alguien tocaba, por lo poco que pude escuchar, creo que se trata de Byakuya --

#001 ; 🌹 ALTAR - BYAKUYA TOGAMI 💭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora