INOCENCIA, DESEO Y AMOR (Juliantina) G!P

capítulo 35

Por la mañana Valentina se recorrió un poco para pegar su cuerpo al de Juliana, sintió frío y buscó por instinto la calidez del cuerpo de Juliana pero no estaba, así que a regañadientes abrió lentamente los ojos, vio el sol resplandeciente entrar por la ventana y efectivamente estaba sola en la cama lo comprobó al girarse para levantarse

Se salió de las sábanas, completamente desnuda camino al baño, se vio al espejo y acarició su abdomen, después de lavar su cara y hacer sus necesidades volvió al cuarto se puso las bragas y la camisa de Juliana, salió de la habitación

En cuanto puso un pie fuera sus fosas nasales fueron inundadas por un exquisito olor a café, aspiró profundamente para disfrutar del aroma a café, camino a la cocina, se paró en el umbral de la puerta, a espaldas de Juliana que estaba preparando el desayuno, Valentina se abrazo así misma suspirando, admirando a Juliana moverse de un lado a otro, solo en bóxer y una camioneta sin mangas, siguió en silencio mirándola, traía su cabello recogido en en chongo alto, dejando ver su estilizado cuello, posó su mirada un instante ahí en ese cuello que era su refugio preferido, luego bajo su mirada a la espalda y brazos que eran fuertes amaba ser rodeada por sus brazos, siguió admirando el cuerpo de su mujer su delineada cintura, su trasero firme, sonrió recordado cuánto le gustaba nalguearla, camino hacia ella lentamente se puso detrás dándole una nalgada y antes de que Juliana se volteara la abrazo por la cintura

- Oye - protestó Juliana - si me duele

- Buen día mi cielo - Valentina saludo dándole un beso en el cuello - perdón creí que no dolía como esta bastante abollonado - dijo dándole una palmadita más en el trasero

- Val - volvió a protestar Juliana soltó la palita con que estaba moviendo las comida, Valentina volvió a nalguearla - ya - Juliana se volteó retadora y antes de que hablara Valentina la tomo del rostro besándola intensamente dejando a Juliana sin aliento, mientras se separaban Valentina le daba mordiscos suaves en los labios

- ¿Ya qué mm? - le habló Valentina sobre los labios Juliana negó - esto es mío - le puso ambas manos sobre el trasero - y puedo agarrarlo, nalguearlo o hacer lo que quiera - le dijo mirándola sin retirar sus manos del trasero Juliana solo asentía sonriendo

- Okay, okay - respondió Juliana resignada volteando a seguir con el desayuno

- Me gusta tú sumisión - le dijo Valentina poniéndose a un lado para mirarla servir el desayuno

- ¿Sumi qué? - pregunto Juliana mirándola confundida, ya con un plato servido en la mano

- Obediencia - respondió Valentina tomando el plató ya servido

- Ah si, si soy obediente - se giro Juliana para ahora servir su plato - es que tú eres muy mandona - dijo riendo fuerte

- Oye - Valentina le dio un golpe con la cadera empujándola riendo las dos

Se sentaron a desayunar riéndose, discutiendo la sumisión de Juliana y lo mandona de Valentina, disfrutando sus momentos en su burbuja de amor

Volvieron a la hacienda después de medio día por fortuna no se encontraron con nadie ni agradable, ni desagradable así que subieron a su habitación.

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Unos días había pasado desde que Lucho llego a la hacienda, Valentina lo había evitado todos esos días, desayunando tarde o en su habitación para no topárselo, todo el tiempo estaba con Juliana no quería dejarla a solas para no darle la oportunidad a ese hombre de hablar con ella

El padre de Valentina tenía un par de días que se había ido a la capital con la promesa de volver el fin de semana siguiente, así que Juliana y Valentina pasaban la mayor parte del día en la biblioteca o en el jardín de la parte de atrás de la hacienda, mientras Eva y Lucia metidas en sus asuntos o tratando pendiente con Lucho y el administrador