Daila Baker
Al día siguiente me preparé con cosas que tal vez usaría, aunque al final me haya decidido por llevar solo mi teléfono y un mini cuchillo que escondía en uno de los bolsillos de mi pantalón, solo por si acaso. Después de un rato recibí un mensaje, era Christian, me había enviado la ubicación de su casa.
Quedaba en el barrio más grande de la ciudad por lo que sé ese lugar solo vivía grandes empresarios que dejaban sus mansiones al cuidado de su ama de llaves ya que solo iban a esa casa una vez por año, en fin, cosas de ricos.
Tomé un taxi y le di la dirección de la casa, después de unos minutos estaba afuera de una gran ciudadela, en la entrada hubo un portero que me pidió mi nombre y me dejó pasar, me enseñó el número de casa en donde Christian me estaba esperando. Su casa - rectifico- su mansión era la más grande entre las demás, la más llamativa por su jardín grande lleno de rosas y flores exóticas, se veía muy bien cuidado.
Después dirigí mi vista a la entrada, era una puerta enorme de madera, estaba viendo todos los detalles hasta que una señora de unos 60 años me abrió la puerta, la saludé y me devolvió el saludo con una sonrisa.
- ¿Eres Daila?.
-Si, mucho gusto.
- El gusto es mío, mi Christian nunca jamás me ha traído a nadie de sus amigos a esta casa, pero me habla mucho de ti, al parecer le agradas mucho.
- ¿Puedo preguntar qué cosas dice sobre mí? - intenté que no suene grosero, pero quería saber si sospechaba algo o no.
- Cosas buenas, no te preocupes mi Christian me mataría si te las dijera- ríe un poco para ella misma. - me habla también de un grupo de amigos, sabes él no es muy sociable, pasó toda su vida en clases privadas así que no sabe cómo relacionarse ni cómo hacer amigos. Es algo difícil para él y el que comience a hacer amigos buenos que no lo quieran solo por el dinero es algo que me da seguridad de que todo estará bien si a mí me pasa algo. Christian es una persona buena, no es capaz de hacer daño a nadie, él no es como su familia.
- ¿Y su familia como es?.
- eso no puedo decirte mi niña- me mira un rato y me da palmadas en el hombro- trabajar aquí fue ser la segunda madre de Christian, no sabes cuanto me encariñé con ese niño, siempre fue diferente, nada comparado a su padre ni hermano, cuídalo bien ¿si?
Si antes estaba confundida ahora estoy peor.
Después de hablar un poco más sobre ella me dijo que Christian estaba en la sala del piano y que ahí me iba a dirigir. La seguí, mientras ella iba al frente yo trataba de tomar disimuladamente fotos de los cuadros o certificados de premios, estudios y otros.
Al llegar a una habitación espaciosa, blanca, y decorada muy meticulosamente se encontraba en un costado un piano negro, y ahí estaba Christian. Notó mi presencia y se levantó para saludarme con un beso en la mejilla.
En el lugar me estaba contando lo que había aprendido ese día que falté, mientras yo trataba de notar algo interesante en su habitación, me llamó la atención un cuadro supongo que era su familia ya que reconocí al director, a su lado un hombre alto y atractivo, pienso que era su padre ya que el compartía algunos rasgos con la persona del cuadro, después estaba una mujer y dos niños de diferentes edades, supuse que era su hermano y su madre.
Me entregó las hojas con los apuntes y llamó a Helen, la señora de antes, que nos sirviera un té.
- Bien, Daila eso es todo, yo ya lo tomé copias así que puedes hacer lo que quieras con estos apuntes. - me dio una sonrisa de oreja a oreja.
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No más secretos
Mystery / ThrillerUn grupo de nuevos estudiantes de diferentes colegios ganan un pase al colegio más prestigioso del país. Conocido por ser muy estricto pero sin registro ni antecedentes del lugar en donde está situado, despierta la curiosidad de cuatro chicos sob...