Si No Es Contigo [Vhope]

『Capítulo 9』

La luz de la luna en realidad era muy bella. La noche que la acompañaba era fría, pero no tanto hasta calar, era un frío en cierto modo cómodo.

Otra cosa que acompañaba la noche era el delicioso sabor de un jugo de manzana natural, de manzanas reales que había cosechado.

En realidad necesitaba eso, en realidad necesitaba descansar un poco de todo a su alrededor. Por eso estaba ahí, con su vaso de jugo que él mismo había preparado, sentado en la banqueta frente a su casa; miraba las estrellas tratando de asimilar las cosas.

"Creo que estoy enamorado, hyung. Mi omega lo reclama todo el tiempo, me trata demasiado bien. Lo siento, prometí que no pasaría nada."

Sonrío hacia el cielo al recordar lo nervioso que se veía su pequeño hermano al confesarle tal cosa. Sabía que no llevaba casi nada de tiempo de conocer a aquel alfa. Conocía también a las parejas destinadas y creía que Jimin había encontrado a la suya. No negaría que en primera se había enojado con el menor y le había reprochado por ser tan apresurado al declarar tal cosa. Pero luego había pensado bien las cosas y se disculpó con el menor.

"De acuerdo, te cubriré de mamá la próxima vez. Por favor tienes que decirme si ese maldito te hace algo. Lleva siempre tu celular y un silbato."

Había sido lo último que le había dicho a su hermano antes de que el rubio le mostrara una sonrisa y lo abrazara.

No alejaría a Jimin de su probable otra mitad, pero de todas maneras se aseguraría de que estuviera a salvo ahí afuera.

Estaba tan fundido en sus pensamientos que ni siquiera notó que alguien se había sentado junto a él.

—Vaya... —Dijo la voz junto a él. 

Hoseok dio un salto en su lugar por la sorpresa, pero al ver de quien se trataba decidió darle un golpe en su nuca.

—Alfa idiota, casi me das un paro cardíaco —Exageró el mayor llevando su mano libre a su pecho, a la altura de su corazón.

El menor reía mientras se sobaba la nuca.

—Lo lamento Hoseok hyung —Se disculpó aún sonriendo.

Hoseok se puso ver su sonrisa cuadrada, esa preciosa parte que adornaba su rostro de manera muy tierna. Inconscientemente, sonrió ante tal imagen del menor. Regresó su mirada al cielo con un pequeño sonrojo; hasta que tomó en cuenta de algo.

—¿Cómo sabes donde vivo? —preguntó extremadamente curioso. El menor volteo su cabeza para poder contemplar la casa de su mayor. En realidad era un lugar grande. Si la mirabas de un lado, se podía ver todas esas hectáreas de terreno, con sembradíos pequeños, de quien sabrá qué, árboles frutales, establos e inclusive vacas. De frente el lugar era enorme, una enorme casa color azul cielo. El castaño se quedó sorprendido ante tal lugar.

—En realidad no sabía que aquí vivías —señaló aún metido en su asombro.

—Ah, ¿entonces qué haces aquí? —preguntó aún más curioso.

—Pasaba por aquí y te vi —contestó encogiéndose de hombros.

El mayor asintió y regresó su vista a su vaso de jugo. Ambos se quedaron en silencio durante un par de minutos.

—Y... —Hoseok trató de sacar plática, no quería que Taehyung se fuera solo porque le había incomodado el silencio. Al ver que había llamado la atención del menor, decidió seguir. —... ¿A dónde ibas? —preguntó incluso tímido; había bajado su mirada.

El menor rió ante la tierna imagen que le ofrecía el omega.

—Iba a la tienda de comestibles.

—Mini-super —corrigió el omega. Taehyung rió mientras asentía.