ღ Chapitre 3 ღ

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Sana

— ¿No es un poco tarde para que estén aquí todavía? — le digo a las chicas, intentando desviar la atención.

— Lo siento, Sana — se disculpa Alice de inmediato, mientras le pone crema a su café — Johanna dijo que no dormiría tranquila si no le contabas todo con lujo de detalles.

— Yo esperaba que llegaras hasta mañana, ¿tan mal te fue? — me pregunta Dany, que estaba sentada en posición de indio en uno de los sillones, con un montón de libros a su alrededor, que pena por ella.

— Dany — la llamo de forma pausada, antes de explotar — ¡¿Quién rayos tiene sexo en su primera cita?! — le digo exasperada, mientras me sirvo un vaso de agua, ya había sido mucho café por hoy.

— Entonces, ¿Admites que fue una cita? — me pregunta ella con una mirada traviesa, para después volver su atención a los libros, yo solo ruedo los ojos con una sonrisa; ésta chica es insufrible cuando quiere.

— Vamos, Sana — vuelve a insistir Johanna — fue solo una cita, ¿No? Podrías contarnos al menos, somos amigas — oh, no. Ahí estaban esos ojos de cachorrito que solía poner cuando quería algo. ¡Mierda! Siempre funcionaba.

— Fuimos a la cafetería donde trabaja Aiden — terminé diciendo,  en realidad había dos en el campus, pero en el otro el café sabía a drenaje — al principio me sentí algo incómoda, ya saben, pero fue bastante considerado y al final terminamos conversando de todo un poco. Creo que... que quiere volver a salir conmigo.

Hubo gritos de emoción por parte de Johanna y Dany y Alice solo me miraba con una sonrisa. Una de las tantas noches que habíamos hecho pijamada, les conté que nunca había salido con nadie, al menos no de manera formal. Tuve un par de citas con un imbécil cuando tenía diéciseis, él era mayor que yo, mucho; se imaginarán que no salió bien. Así que las chicas parecían realmente interesadas en que yo saliera con alguien, en especial Dany, que insistía en que era "la mejor etapa para conocer al amor de mi vida" o, en su defecto "una noche de locura adolescente con sexo de adulto", ella lo dijo, yo solo repito.

— ¿Y? — me preguntó Alice cuando las chicas dejaron de gritar.

— ¿Qué? — respondí algo nerviosa.

— ¿Qué piensas de volver a salir con él? 

— Bueno, en realidad no creo que... — me detuve antes de decir lo que en realidad quería y lo pensé unos segundos — ¿Saben qué? Sí quiero salir con Oliver de nuevo, es decir, es muy agradable, podríamos ser buenos amigos.

— Sí claro, justo lo que él está buscando — dice Johanna con evidente sarcasmo — una amiga, una muy buena amiga que lo escuche cuando tenga que desahogarse cuando la chica que le gusta lo mande directo a la friendzone.

— No la molestes Joha — interviene Alice. Gracias por salvarme — el chico ni siquiera lleva un mes de conocerla.

— Exacto — digo señalando a Alice — podemos salir en plan de amigos, no necesariamente en plan romántico.

— ¡Espera! — interrumpió Dany, cerrando con más fuerza de la necesaria, un libro sobre embriología, sea lo que sea eso. Todas la miramos con atención, esperando a que continúe — ¿Reggie estuvo de acuerdo con tu cita? — la observé como si le hubieran salido dos cabezas más.

— ¿Por qué tendría que estar o no de acuerdo con que salga con Oliver? — pregunto con fastidio, Oliver pensaba igual, ¿Qué le pasa a esta gente?

— Bueno, es el mejor amigo de tu mejor amigo, creí que eso ya había quedado claro.

— Sí quedó claro, pero, ¿Podría alguien explcarme por qué sería tan malo salir con él?

Dany se levantó del sillón, tomó una taza de café y se colocó frente a mí.

— Mira amor, tú puedes salir con quien tú quieras, eres hermosa y agradable, un poco anticuada, pero se te perdona por ser linda — no estoy entendiendo nada, ¿alóh? ¿911? — pero debes tomar en cuenta varios factores, en caso de que quieras, de que ambos quieran algo serio, ¿No crees que tu mejor amigo, puede sentirse incómodo?.

— ¿Me estás diciendo, que debo de pedir la autorización de Reggie cuando quiera salir con un chico? — pregunto notablemente molesta.

— No, cariño, es que no es cualquier chico, es su mejor amigo. Es como si Oliver quisiera salir con la hermana de Reggie — dice mientras me acaricia el cabello en un intento por calmar mi furia, spoiler: no funcionó.

— No soy su hermana — digo seriamente — es mi mejor amigo y como tal, no tiene por qué meterse en mi vida amorosa — Dany me soltó el cabello y resopló en dirección a Alice, que se había mantenido callada hasta el momento.

— Alita, dile algo por favor — fue lo último que dijo mi roomie, antes de regresar a lo de sus libros. Alice me observa y suspira, antes de tomar el lugar de Dany.

— Bien, escucha — oh, no, aquí viene el regaño de mamá gallina, ni siquiera hice algo malo, así que no estoy de acuerdo con esta intervención — Dany — se dirige primero a ella, cosa que agradezco — Sana no tiene por qué pedirle permiso a nadie para salir con un chico; ni a Reggie ni a nosotras. Y, Sana, si vas a salir con Oliver, debes dejarle muy claras tus intenciones, sería demasiado cruel que jugaras con sus sentimientos, siendo el mejor amigo de Reginald.

— ¿Qué dices? ¿Jugar con sus sentimientos? — digo entre confundida y nerviosa — Alice, estás hablando con una chica que ni siquiera ha dado su primer beso, ¿Cómo podría yo jugar con los sentimientos de alguien? — Alice deja su taza en el fregadero y hace lo mismo con la de Johanna, quien protestó porque no se había terminado su café.

— Sabes a lo que me refiero, Sana — dice mientras toma sus cosas y, entonces, yo guardé silencio — Vamos Johanna, aun tengo que hacer tarea. Descansen chicas.

— Adiós Sana — se despidió Johanna con una cara que reflejaba una sola cosa: no me quiero ir, pero Alice es la que manda.

— Adiós pequeña — me despido alborotando su cabello — descansa Alice... gracias por el consejo — le digo ahora comprendiendo sobre qué hablaba, ella solo me guiñó un ojo y salió del departamento.

Dany me observó de la misma forma en que un león observa a su presa, incluso sus ojos tenían ese toque felino, como si en cualquier momento fuera a morder mi garganta.

— Suéltalo — le digo cruzándome de brazos frente a ella.

— ¿Alice sabe algo que yo no? — se veía molesta, estaba molesta.

— ¿De qué hablas? — Demencia debería ser mi segundo nombre.

"Sabes a lo que me refiro Sana" — hizo una pésima imitación de Alice, por lo que solté una risilla.

— Oh, vamos, ¿te vas a molestar por eso? — intenté bromear.

— Tu roomie soy yo, así que reclamo el derecho a esa información, me conociste primero.

— Es... — dudé un poco, ¿Sería tan malo decirle? — sería incómodo para ti — ella cerró los ojos y me analizó a detalle y, como siempre, esa mujer me leyó la mente.

— ¡Oh por el amor de Zack Efron! ¡¿Te gusta Reggie?! — maldita Danielle y sus hablidades psíquicas.







¿Hay alguien aquí? JAJA. Bueno, aquí está un nuevo capítulo de esta aburrida historia de amor.

Cuéntenme, ¿cómo estuvo su fin de semana?

A mí también me gustas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora