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Chapter four, season one

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Chapter four, season one
























El reloj marcaba las nueve y media de la noche, Yoonoh estaba viendo una serie en la televisión con su perro en sus piernas, aquella notificación no se borraba de su cabeza y no había algo que lo pudiera ayudar a hacerlo.
Si teléfono vibró y al observar la pantalla se dio cuenta de que era uno de los chicos.

Hasta que contestas Yoonoh

¿Que quieres Suh? Estoy ocupado

Ocupado, seguramente haciéndote una paja, debes estar cachondo luego de casi besarte con la rubia

—¿Que es lo que quieres?

Bueno, entonces no estás cachondo, ¿que te trae molesto?, normalmente andas por la vida sin problemas o preocupaciones

—Nada, solo son molestias, pero nada importantes, se olvidara en unos días

¿Unos días dices? Entonces si es algo grave, cuenta todos los detalles

—No Suh

Y colgó la llamada antes de que el chico pudiera decir algo mas, solo era un problema que pasaría en unos días, no había nada de que preocuparse, solo debía ocuparse de los problemas del presente.

🌺🌺🌺

Atormentando su mente por la estupidez que había cometido unas horas atrás, Eunyeong sólo jalaba su cabello mientras negaba desesperada con lágrimas en los ojos. Su madre se había ido a dormir después de hablar con ella y disculparse por lo que había dicho en el auto, pero sabía que sus palabras tenían razón y que Yoonoh nunca la notaría.
No era bonita, nunca usaba maquillaje y el cuerpo ni decirlo, no estaba bien formado como lo que Yoonoh quería, ella era todo lo opuesto a lo que él buscaba.

Abrazando su almohada favorita que Yuna le había dado en su cumpleaños número quince, Eunyeong ahogó sus lágrimas y sollozos al recordar cada una de las palabras escritas en aquel papel y que rondaban en su cabeza cada que podían.
Palabras que habían salido de su corazón y de su mente, que nunca habían sido tomadas con importancia, sino que con desprecio y burla.

Sus ojos comenzaron a cerrarse poco a poco y cayó en un sueño profundo, no sabía que pasaba a su alrededor. Aquel sueño comenzaba de nuevo como si hubiera entrado a secundaria, mismo día, fecha y hora; así como el salón y compañeros que jamás olvidaría.

Pero esta vez el sueño era diferente, se veía a ella misma sentada en aquella penúltima silla, antes de que su mundo comenzara a desbordarse. Antes de que aquella chica un año mayor que ella entrara por aquella puerta con una sonrisa en el rostro y todos miraran a Yoonoh mientras le daban codazos o hacían silbidos bastante obvios que indicaban que ella era su novia, la primera de muchas que ella conocería.

Luego el escenario cambió, ahora estaba en su salón de segundo año, donde varios compañeros se habían ido debido a bajas calificaciones y varios de otro salón llegaron ahí, debido al intercambio. Fue ahí donde todo empeoró y su relación como amistad comenzó a alejarse, no sólo por las novias de Yoonoh, sino también por sus amigos que le decían que ella gustaba de él. A partir de ese año, empezaron a actuar como desconocidos y la mayoría en el instituto donde ella asistía sabían que a ella, le gustaba Yoonoh.

El escenario volvió a cambiar, ahora en tercer, último año de secundaria. Bancas en parejas, toda la escuela lo sabía, incluso los directivos, era un estupidez el cómo la miraban sólo por ir tras el chico mayor conocido en el instituto; Eunyeong solo quedó con sus tres amigos, no más, quienes la apoyaron y animaron a que debería de terminar con aquellos sentimientos..............

Un golpe hizo que Eunyeong despertara de aquel sueño, pestañas mojadas y cabello alborotado. El golpe volvió a escucharse y está vez más cerca de su puerta. La abrió con cuidado y se dio cuenta de que ahora estaba en una habitación más grande con un espejo enfrente de ella. Se acercó temerosa de lo que podía pasar y al visualizar su imagen se vio con aquel uniforme de secundaria que tanto odiaba.

La imagen se borró y ahora mostraba a una mejor versión de ella, maquillaje, cabello arreglado y cuerpo delgado; se odiaba tanto que quería morirse.

Es una mejor versión de ti, apuesto que a todos les encantará, en especial a Yoonoh

La voz de su subconsciente hablaba en susurros, se escuchaba lejana y en ocasiones cerca de ella. Apretó sus puños con fuerza, sabía que era cierto, odiaba su cuerpo, su rostro, sus manos, todo acerca de ella, pero no había nada para cambiarlo, salvo volver a nacer.
Golpeó el espejo con fuerza y cuando menos lo esperaba ya estaba despierta y con sus padres sosteniendo su cuerpo en brazos, la miraban preocupados al igual que su mano ahora ensangrentada y con varias cortadas. Había sido un sueño, pero se había sentido tan real.

🌺🌺🌺


Con su mano vendada y el dolor recorriendo toda la zona, Eunyeong entró de nuevo al instituto, otro día en aquel lugar, sintiéndose como una eternidad.
Agradecía el tener un perfil bajo en el instituto así nadie hablaba ni sospechaba de cuáles eran sus gustos o preferencias, bueno solo cuatro sabían aquello y todos sabemos quienes son.

Caminando a su salón y con la mirada gacha, su cuerpo sintió un golpe al chocar con alguien delante de ella y la bocina con música sólo la dejó helada.

L-lo siento

Levantó un poco la vista y se disculpó de nuevo esta vez pasando a su lado y subiendo las escaleras con la mirada fija en el suelo y los puños apretando sus prendas

¿La conoces Yoonoh? Te vio durante unos segundos y luego se fue

No la conozco, nunca la había visto

Aquellas palabras se escucharon a lo largo de la escalera y llegaron a sus oídos, aguantando las lágrimas en sus ojos y subiendo con rapidez para llegar a su aula y sentarse en su lugar, las lágrimas amezaban con salir y sentía aquel nudo en su garganta, aquel nudo que no podía quitar por más que quisiera.
No pudo contenerse más y comenzó a llorar desesperada, los compañeros de aula sólo la miraban preocupados y uno que otro se seguía de largo para no preguntar.
Irene y Donghyuk no tardaron en llegar, y en cuanto la vieron así corrieron hacía ella sin dudarlo.

—¿¡Eunyeong que sucede!? ¿¡Te encuentras bien!? Deja de llorar por favor

—¿Donghyuk puedes ir por papel?, me quedaré con ella, aun falta para que las clases inicien

El chico asintió y salió casi corriendo de ahí, estaba preocupado por ella, amigos desde secundaria, eran casi como hermanos, todos ellos eran un familia y jamás dejarían que se lastimaran unos a otros, al contrario debían cuidarse.

Eun, deja de llorar

Still loving you [Jung Jaehyun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora