My Karma Academy (Karmaland AU)

『Capítulo 1』

"Pensamientos"
Narra
—Habla—
Recuerdos

¡Lenguaje vulgar!
  

♣︎【【【【♣︎】】】】♣︎

Narrador Pov:

—¡Miren! Mi castillo de arena es el mejor que hay— exclamó con orgullo el niño con ojos achinados mientras terminaba de manipular dicho material.

—No seas mentiroso, el mío es el mejor de todos— dijo con el mismo orgullo otro niño, con solo una pequeña montaña de arena frente a él junto con una ramita en la cima simulando ser una bandera.

—¿Mentiroso? Solo mira esta belleza, es una obra de arte— dijo con aún más orgullo el chico señalando su castillo— Además, esa cosa no debe ser considerada un castillo— dijo señalando a la creación del menor.

—¿¡Qué?! ¡Veg, ¿tú qué opinas?!— dijo el niño viendo esperanzadamente al susodicho.

—Lo que opino es que los dos castillos no son muy simétricos. Le doy la victoria a Rub— dijo sin más.

—¡Esto es injusto, pido otra partida!— dijo ofendido el de pelo ceniza— ¡Merezco ganar!.

—¡No, no, no, no!— negó varias veces Rubius de forma infantil con sus manos— ¡La victoria es mía y de nadie más, muajaja!— exclamó para luego patear y destruir el castillo del mayor.

—¡Nooo, mi bebé!— dijo juntando los restos de su castillo en sus manos— Te voy a matar— comentó avalanzándose al castaño.

—¡Ahhh, ayuda!— suplicó dramáticamente mientras combatía con su amigo— ¡Vegetita, mi príncipe violeta, ayúdame por favor!— pidió viendo al mayor de todos.

—No Samu, ayúdame a mí— pidió o mejor dicho obligó al mayor, ya que el de boina utilizó su particularidad para atraerlo hacia ellos con una piedra que fue lanzada a la espalda del nombrado desde atrás.

—¿¡Pero qué haces cabezón!?.

Risas de los tres niños fueron las que se escucharon luego de que el azabache se uniera a ellos, volviéndose así una pelea de todos contra todos, donde ninguno tenía compasión con nadie.

Luego de varios minutos siguiendo con la batalla, el primero en parar fue Rubius, seguido así de Vegetta para luego terminar con Willy; todos respiraban pesadamente tratando de recuperar el aire perdido por sus pulmones.

—¡Eso fue divertido!— exclamó el castaño al recuperar la mayoría del aire— Cuando al fin consiga mi don, voy a pelear contra ustedes hasta que me pidan misericordia— dijo macabramente asustando un poco, pero solo un poco, a los dos presentes.

—¿Seguro? ¡Ja! No me hagas reír, Rub— dijo burlón Willy— Obviamente ganaré yo.

—Lamento informarte esto Guille, pero estoy casi seguro de que yo ganaré— se unió el de ojos violetas.

—No no no, yo voy a hacer el ganador— dijo Rubius.

—Esto me huele a una promesa— dijo Guillermo— Cuando Rub consiga su don, todos nosotros pelearemos hasta quedar muertos, ¿si?.

—A veces me das miedo, Guille— dijo el de cabellos azabaches al escuchar "quedar muertos" de parte de su mejor amigo— Pero sí, es una promesa— afirmó contento— Y tú Rub, ¿qué opinas?.

—¡Sí, está decidido! Nos enfrentaremos tan pronto obtenga mi don y les ganaré a los dos, ya lo van a ver— aseguró el menor con confianza— Ya lo verán...— susurró para sí mismo mientras se recostaba nuevamenge en el suelo para así ver el cielo azul al igual que sus amigos, sumergiéndolos así en un cómodo y reconfortante silencio.