MI REFLEJO, EN EL ESPEJO

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28 de marzo mi papá fue encontrado apuñalado en casa de 24 puñaladas.

A mí me mantienen en este internado encerrada. No tengo ideas de porque me acusan. Es triste, injusto, desgastante. Papi y yo éramos tan unidos, él era mi héroe y yo su princesa bonita. Nos encantaba estar en casa, jugar videos juegos y me acompañaba en mi habitación a ver mis series favoritas. Me acurrucaba a su cuerpo caliente, cuando me quedaba dormida.

No entiendo lo que pasa. Todos los días vienen los estúpidos siquiatras a preguntarme las mismas idioteces. ¿Qué hice ese día? ¿Cómo me sentía? Y me da rabia cuando digo que no lo recuerdo, y me miran con sus caras incrédulas como si le estuviera hablando mentiras. Lloro de impotencia, lo juro, en el día No lo recuerdo.

Mi papi era mi todo, me mimaba, me daba muchas caricias. Sentía sus cálidas manos entre mi entrepierna cuando yo dormía. Me quedaba tranquila mientras él se satisfacía. Él era tan feliz con eso y yo fingía que no me dolía, que no lo sabía.

28 de marzo mi papi fue encontrado asesinado en el piso de mi habitación, alguien lo mato y a mí me acusan. Yo, que siempre lo ame, siempre lo cuide. Pero no recuerdo que paso ese día.

Dicen que me encontraron con el pijama ensangrentado, con un cuchillo de carnicero en mano y en toda la casa retumbaba mi risa. Los policías mienten, los doctores dicen que mi inocencia es cruel y macabra, eso me entristece, me lastima mucho.

Todos mienten, todos hablan, todos juzgan. Dicen que soy una de las niñas más peligrosas del condado, que tengo trastorno de personalidad múltiple, me humillan y me medican, Que decepción y repugnancia me causa la justicia.

No me he quedado aun del todo sola, aún tengo a mi hermanita. Ella en las noches viene y me visita. Es tímida, no deja verse de nadie, me consuela y me dice susurra palabras bonitas. Me dice "que sería bonito sacarle los ojos al doctor" "mil ideas de como desfigurarle la cara a la enfermera rubia y bonita". Sus chistes son tan divertidos, me excitan tanto y hacen que me haga cosas ricas.

Mi hermanita si sabe que paso ese día, ella jugaba con el cuchillo y el cuerpo de papi, le hacía muchos huecos y la sangre salía. Que divertido, ¡qué alegría!

Yo no mate a mi papi, él me quería, yo lo quería. Jugábamos a darnos caricias. Nada más, que mi hermanita no puede decir la verdad, pues únicamente la veo en mi reflejo cuando me miro en el espejo.

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