El tacto de sentir

Capitulo 13

                                                                            la primera cena 1.0

-Que decente te ves -Melanie, con su comentario venenoso.

Siempre llevo esto no sé qué le sorprende, solo que esta vez un jersey negro con una abertura en la espalda, unos botines cafés y un moño. Bastante normal.

-Siempre visto así no le veo la diferencia de hoy.

Es obvio que quiere provocarme, para hacerme quedar mal, pero está mal, no pienso caer.

-Bueno, te lo digo porque así luces bien, sin estar mostrando mucho tu cuerpo.

-No creo que por usar faldas un par de veces este enseñando mucho mi cuerpo, dime quien no las utiliza? -contesto lo más sutil que puedo.

-En esta vida hay dos tipos de personas las exhibicionistas y conservadoras, desde luego que hay personas que no saben cómo utilizar una falda decentemente.

-Pues que fea manera de ver la vida tienes, porque desde luego, que no todo el mundo va por ahí fijándose en como vistes, y si es así, ya me imagino su vida de miserable. -termino por sonreírle, falsamente.

Su mamá hace como que no me oye, mientras que los demás, tratan de iniciar otra conversación,ella no sabe que decir y Edgar no le quedo de otra más que reírse por lo bajo, su abuela esta que me empala con la mirada, no le caí para nada bien, pero era de esperarse, más bien me lo esperaba de su madre por las advertencias de mis compañeras, creo que, como soy la única nuera podría ver una excepción. Si les caigo bien o mal me vienen valiendo treinta hectáreas, porque no vine aquí a caerle bien a todo el mundo.

Por fin termino la cena, y desgraciadamente para convivir más, pasamos todos juntos al cinema, mientras que todos discutían que película poner, pedí disculpas como la educada que soy para dirigirme al sanitario. <<noten el sarcasmo<<

la verdad es que ya estoy muy abrumada, no soy de estar conviviendo con muchas personas y la verdad es que no me gusta, cuando llegamos a tener visitas en mi casa prefería encerrarme en mi habitación, que escuchar a las parlantes de mis tías y a las hipócritas de mis primas, ah, además estar soportando comentarios misóginos por parte de algunos de los invitados, gracias a dios el único que no es así es Damon, el viene de otro mundo.

Estoy en busca del baño, pero no sé dónde mierda queda, así que, en lugar de ir habitación por habitación, me voy de nuevo a la terraza, al fin que nada más quería fumar.

-Dime que no quieres aventarte.

Volteo para ver de quien se trata, veo a Edgar, junto con su cabello ondulado. Así que rápidamente tiro el cigarro al vacío.

-No creo que valga la pena, y menos darles ese gusto.- hablo tranquila, tratando de disimular

Ojalá que no se dé cuenta del olor.

-Hablas enserio?, porque la cara que traías en la cena decía lo contrario. -recuesta sus brazos sobre el barandal, al lado mío.

-No me agradan mucho los camarones, tampoco la crema de champiñones.

-Créeme que te acostumbraras, es la especialidad de esta casa. Y tampoco tienes que fingir que no lo estas pasando bien y no solo por los camarones o los champiñones. -enciende un cigarro.

Volteo a verlo.

-Lose porque yo también pase por eso-continua-, de hecho, a ti te están tratando muy cordial a como lo hicieron conmigo. La Señora Gen no era para nada lo que ahora trata de ser, quería lo mejor para sus hijos, según ella tener una vida sana sin personas que les trunquen el camino, involucrarse en el negocio familiar y ser decente en todo el momento, claro está, que no soy quién para juzgar, pero esa señora me juzgo a mí, de la noche a la mañana cambio, ahora dice que lo mejor para sus hijos será lo que ellos decidan hacer y mejor si están legos de aquí.