Un Secreto tras los Muros 🦋⏳🫀(MiraBruno) +18

Secretos

Comencé a imaginarlos nuevamente, la posición en que tenia a Isabela encima, pero esta vez no era ella, sino yo... y era Bruno a quien imaginaba abajo.Con lo lubricado que estaba, metí un segundo dedo, y profundice mas en mi interior, con la otra mano tomaba y apretaba mi pecho imaginando que era él quien lo hacia. En eso iban mis pensamientos, cuando un fuerte dolor se hizo presente en mis adentros. Mire mi mano, y estaba manchada de sangre, sabia que no era momento de mi periodo por lo que me asuste, me envolví en la toalla nuevamente y me levante para pedir ayuda, no podida ir con mi mama, ¿Cómo lo explicaría?

Fui al muro de mariposa y le pedí a Casita lo abriera para ir donde Bruno. Corrí por el interior de los muros hasta su puerta, antes de entrar escuche mi nombre, pero no estaba llamándome era mas bien una suplica. Se escuchaba muy cerca de la puerta justo al otro lado.

-Tío Bruno?- Los ruidos de cosas cayendo y movimientos torpes y avergonzados se hicieron presentes.

-Mira! cuanto tiempo llevas ahí?-Decía mientras abría su puerta.

-No tanto... por que no traes camisa- Estaba sudado, podía ver con detenimiento su piel, la forma de su pecho y el pelo que tenia sobre este, se había recogido en cabello en una media coleta. y tenia la runa en las manos tratando de tapar su pantalón.

-Dijiste que tú no tenias esas "necesidades"- Me miro, lo mire, nos miramos. Un silencio incomodo se formo.

-Mira, que necesitas-dijo para cambiar el tema-Y por que vienes hasta aquí así, en toalla-Lo vi tratar de desviar su mirada.

Le mostré mi mano, me paso a su cuarto y me sentó en su cama. El se dirigió al pequeño lavabo tomo una toalla que le había dado 1 año atrás con una mariposa bordada. La mojo y me tomo la mano para limpiarla.

-Creo que me lastime por hacerte caso Bruno-

-A mi?-

-Dijiste que me encargara- De nuevo su cara estaba muy ruborizada al igual que la mía.

-Mira no creo que te hayas lastimado, es normal sangrar la primera vez. Por que...¿Ya no te duele o si?-

Negué con la cabeza, ya no llevaba la ruana cubriéndole el pantalón, por lo que note un abultamiento.

-Tío Bruno, creo que no hay forma de que sigas negando que si tienes esas "necesidades".

Estaba sentado frente a mí, me acerque decidida a besarlo incluso cerré mis ojos, cuando sus manos me tomaron por la cintura hasta ponerme justo sobre el.

-Esto es lo que quieres niña?

Eso sí que no me lo esperaba, su voz y la forma tan decidida no era acorde a lo que conocía de Bruno. Afirme con la cabeza mientras mordía mi labio.

-Estas segura?

Me incline para besarlo, su mano se posó en mi nuca haciendo un beso más intenso.Esa noche no hicimos lo que Camilo e Isa habían hecho, sin embargo, conocí por primera vez, lo que era que alguien tocará mi cuerpo con delicadeza y deseo al mismo tiempo.

Me pidió cerrar mis ojos sin hacer trampa, recorrió con su mano mi cuerpo desnudo, pasó su dedo desde mis labios, bajando por el cuello trazando una línea de sensaciones no imaginadas jamás, al menos hasta ese día. Detuvo su dedo en uno de mis pezones, lo acaricio suavemente, y luego sentí su boca posarse ahí, abrí mi sus ojos para mirarlo, pero enseguida lo noto.

-No hagas trampa Mariposa-Sonrió juguetón -Eres tan hermosa.-

Llevo su mano directamente a mi entrepierna, la acaricio por unos instantes, y un gemido se escapó por mis labios.

-Esta bien, no te contengas. Me encanta tu voz.

Sentí como introducía su dedo, y por un segundo temí volver a sentir ese insoportable dolor, pero las sensaciones previas ya me habían preparado.

Metió entonces un segundo, y los movió dentro de mi, me sentía llena y la presión que ejercía dentro se sentía realmente bien. Los movimientos aceleraron y la respiración se fue agitando cada vez más, hasta convertirse en gemidos más fuertes.

-Ahí Bruno, por favor... deten... ahh creo que voy a orinarme.

-Shh Mira- me jalo para besarme sin detener el movimiento de sus dedos.

-Déjalo salir Mariposita, eso no es orina....

Las sensaciones llegaron a tope, sentí líquido escurrir entre mis piernas, mis fuerzas se fueron de una, y cuando sus dedos salieron de mi, desee repetirlo jn millo de veces más... Me sentía un poco avergonzada pero feliz, hasta que Bruno metió en su boca los dedos.

-Eww Bruno no, ¿Qué haces?.

-Mira... sabes delicioso.

Cubrí mi cara con mis manos ahora más avergonzada. Cuando al fin voltee a mirarlo, mis ojos inevitablemente se dirigieron al su pantalón apunto de romperse.

-Tío Bruno, déjame ayudarte ahora a ti.

-Sera otro día Mira, ya casi es hora de la cena, y estoy seguro que Julieta subirá a llamarte.

-Pero...- Me calló con un beso.

Me sentí un poco mal por todo lo que él había hecho por mi, y yo no había podido agradecerle de la misma manera.

Recogí mi toalla de la cama, y me dirigí a mi cuarto, estaba segura de que Bruno terminaría aquello el solo.

Más tarde ocurrió como me dijo, mi madre me llamó a la cena y observe a Isa y Camilo llegar juntos.

Era obvio que habría más secretos en casita .