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Olivia

-La gran cena familiar-

A la mañana siguiente, camino hacia el trabajo. Cuando llego al restaurante veo que está cerrado.
¿No me avisaron que estaría cerrado o algo por el estilo? Le marco a Alex en seguida.

-Hey, dude.

-¿Hoy no tenemos trabajo? Intento abrir una puerta pero está bloqueada. No veo gente a los alrededores ni algún sonido por el estilo.

-No. Hoy el restaurante está cerrado.

-¿Por qué no me habías dicho antes?

-Te lo dije, pero estabas muy distraída cuando te llamé. Probablemente ni me escuchaste.

-Joder—susurro—Bien, nos vemos—le cuelgo.

Le marco a Anne.

-Hola Anne—saludo.

-¡Hola! Ya no habíamos hablado. ¿Cómo estás? ¿Todo bien? ¿Qué me cuentas?

-Ah, bien, solo que vine a trabajar y estaba cerrado. ¿Qué hay de ti?

-Ah, todo bien. Un poco nerviosa. ¿Cuándo podemos vernos? Hay muchas cosas que quiero hablar contigo.

-¿Estás ocupada hoy?

-Hasta en un par de horas. ¿Quieres venir a mi casa?

-¿Puede ser mejor en la mía?

-Claro. Voy en seguida. Me encanta ir a tu casa, siento que tiene vibes muy lindas y armoniosas.

-Genial. Nos vemos.

Camino de regreso a casa, invito a Anne a venir a la mía por una sola razón: Jessica no está.

La paz y la tranquilidad de que ella se fue.

Abro la puerta con mis llaves y entro a la sala de estar. Me quito mi sudadera para después colocarla en el sillón. Me siento y prendo la televisión para esperar a Anne. Coloco una serie.

Suena el timbre a los pocos minutos y abro la puerta mientras como algunas frituras.

-¡Livilivi!

-Hola—Anne me abraza.

-¡Tengo mucho que contarte de la cita! Voy a estallar de la emoción si no te cuento ahora mismo.

Ambas nos sentamos en el sillón. Junto mis manos par hacer calor y mi cuerpo se dirige a ella para prestarle toda la atención.

-De acuerdo.

-Primero, Alex y yo caminábamos por las calles de la ciudad mientras platicábamos un poco. Después empecé a darme cuenta de que Alex estaba ¡nervioso! Entonces dije: "oh, no". Me empecé a preocupar ¿sabes?

-¿Y qué más pasó?

-Bueno, Alex me dijo: "Oye Anne... ocupo decirte algo muy importante". Me estaba poniendo muy nerviosa y un poco asustada, pero de pronto ¡comenzó a llover! ¡Salimos corriendo! No queríamos mojarnos, pero llovía muy fuerte.

Recuerdo a Asher y a mí en mi habitación besándonos con la ropa mojada. Mierda, todavía no puedo superarlo. Asher me dijo que habló con Anne al respecto y que ella no iba a mencionar el tema, pero aún así lo sabe, y eso me incomoda un poco.

-Vaya. ¿Se mojaron mucho?

-Un poco, pero alcanzamos a llegar a una pastelería que estaba cerca. Entonces nos sentamos en una mesa, ordenamos un pastel, comimos un poco y luego mientras charlábamos... Alex me dijo si podía ser... ¡su novia!

Nuestra propia canción [ Libro 1 • ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora