Capitulo 17

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Ansur.

-Con Maia-

Maia se encontraba sentada quietamente a la orilla del rio, únicamente tirando piedras al agua mientras que su mirada estaba perdida. No había duda alguna de que el escuchar que ella estaba embarazada había sido un gran shock para la pelirroja.

Una madre… francamente la pelirroja nunca se vio a ella en un rol como ese en donde ella seria responsable de una nueva vida.

Y aun así ahora dentro de ella se encontraba formándose una nueva vida en este momento... una vida que ella hizo con su amado.

"Maia, ¿Estas bien?" La voz de una preocupada Claudia se escuchó por detrás de su amiga.

Maia ni siquiera volteo para mirar a su camarada.

"Sabes Claudia… yo nunca me vi a mí misma como una mujer que pudiese ser una madre," Admitió Maia dando una sonrisa triste al acariciar su estómago donde ella sabía que su futuro hijo o hija (En realidad cinco… pero el saber el número exacto sería demasiado shock para la pobre) estaba residiendo.

Básicamente… Maia pensaba que ella no tenía lo necesario para ser una madre. Ella no era una mujer femenina como lo era Prim, elegante como Kaguya, educada y con modales como Claudia… así había varios ejemplos.

Maia era más del tipo de chica que disfrutaba el alcohol, una buena pelea y en general una aventura… en general con ese tipo de vida uno no podría pensar en material de madre… incluida la propia Maia.

"Si… si naciese ese pobre niño tendría una madre terrible," Suspiro Maia, "Creo que una mujer como Prim tiene todo lo necesario para ser una madre: Dulce, comprensiva, elegante…" Para Maia era su amiga de cabello rosa la cual era la mejor opción para ser una madre… la pelirroja no sabía que la de cabello rosa ya estaba llevando dentro de sí a un bebe… uno que compartía padre con los cinco dentro de ella.

"Ciertamente, de entre todas Prim es quien puedo ver de entre nosotros mejor como madre," Asintió Claudia… en su caso especialmente el admitir algo como eso era duro, pero con Prim incluso Claudia creía que sería mejor madre que ella.

La chica de cabello rosa era dulce, con un corazón grande… básicamente cualquier niño adoraría a una madre así.

"Comparada con ella… yo no creo poder," Suspiro Maia quien termino comparándose con la pelirrosada en un aspecto que ella no creía ser capaz de ganar.

'Si así lo crees entonces… ¿Por qué tus ojos están llenos de dudas?' Mentalmente Claudia dijo eso, ella sentía que decirlo directamente no sería buena idea cuando Maia se veía así de afectada.

Pero esa actitud indicaba que de Maia no concordaba totalmente con sus palabras. Eso era claro para quien estuviese hablando con ella.

Y si bien podía ser debido a su propia situación… Claudia quería que Maia pudiese verlo también… que aun si sus palabras decían algo sobre aquello que estaba creciendo dentro de ella, sus sentimientos podían ser lo opuesto de esas palabras.

Pero para eso… la Princesa Guerrera de Ansur necesitaría decir ciertas palabras para que Maia pudiese ser honesta consigo misma.

"Pero sabes Maia, aun si fue un accidente lo tuyo… la verdad es que realmente te envidio," Comenzó a hablar Claudia quien acariciaba la espalda de su amiga para aliviarla un poco después del vomito, "Después de todo a mí me hubiese encantado estar embarazada… pero esa opción no es posible para mí," Suspiro Claudia quien para hacerle ver a Maia como había contradicción en sus sentimientos, esta decidió usar un arma muy efectiva: la verdad.

El Sombrero De Paja En Eostia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora