🚨ATENCIÓN🚨
Está historia NO ES MÍA.
✅Autora Original es: @DulceBHndez240395
✅La historia Original se llama:
Mi Príncipe Predestinado
✅Todos los derechos de la historia son de ella yo solo la adaptaré al Mewgulf.
✅Tengo permiso de la autora, para...
Suppasit no podía creer que de nuevo su pequeño principe está frente él.
Su cuerpo tenía espasmos de la emoción, pero desde que se fue acercando lo pudo sentir y oler sabía que no podía estar equivocado, era su príncipe.
Después de salir de su transe reaccionó y se lanzó a darle un abrazo necesitado, Gulf simplemente lo observaba, quería saber cuál sería su reacción después de.abandonarlo sin ni una explicacióón.
El Omega pensaba que tal vez lo rechazaría, se enojaría, pero justo ahora los dos tenían los ojos llenos de lágrimas, disfrutando su encuentro y dejando que los ahora lobos tengan su primer encuentro y su primera cercanía.
—Perdóname Alfa.
—Cariño ¿que es lo que hiciste? ¿Cómo es posible?
—Te prometo qué te contaré todo en casa ¿sí? –Dijo empezando a temblar por el frío.
—Está bien cariño ahora, hay que transformarnos no quiero que te enfermes.
Los dos se convirtieron en lobos, uno negro cómo la noche que estaba por caer y el otro blanco como la nieve que cubría el Bosque.
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Los dos habían comenzado a correr a su hogar, cuándo muchos híbridos llegaron y juntó con ellos, el Rey Tul.
El aullido del Alfa se había escuchado en cada rincón del Bosque, así que los habitantes de las diferentes manadas habían ido a verificar que todo estaba bien, encontrándose con la sorpresa de ver al Alfa con un Omega.
El ceño del Rey Tul se frunció y muy molesto se bajó de su Alfa.
—Suppasit ¿me puedes decir quién es este Omega con el que estás? –Le hablaba al gran lobo frente a él. —Tan pronto de diste por vencido, apenas hoy en la mañana hablamos y ahora ya estás con otro.
El Alfa gruñó.
Max se acercó rápido a su Omega y lo rodeó con sus fuertes brazos.
—Amor es mejor dejarlo, ya vimos que está bien. Regresemos. –Y cuándo iba a dar la vuelta para llevarse a Tul, el aroma de flores y brisa le llegó.
Max se volteó sorprendido mirando fijamente los ojos del lobo.
—¡Príncipe Kanawut! Es un gustó tenerlo de vuelta. –Max hizo una reverencia, los habitantes ahí presentes no entendían de que hablaban cómo el Príncipe sería un lobo, hasta que el lobo blanco regresó la reverencia.
Tul se lanzó al cuello del Omega, lo abrazó y lloró. Gulf siempre sería su pequeño.
—Oh girasol me vuelves a hacer algo así y te juro que te correré del Bosque y no te perdonaré jamás. Nos vuelves locos y nos haces sufrir. –Mencionó sin soltar su cuello.
