PRINCIPE PREDESTINADO ADAPTACIÓN TERMINADA

🔥Celo🔥

Historia Original de DulceBHndez240395

Empezamos con la maratón de esta historia.

1/?

Mew se encargó de darle el alimento en la boca a su Omega después de eso esté se le había colgado cómo un tierno Koala sin querer soltarlo así que lo llevó a la recámara dónde lo dejó con cuidado en la cama.

Gulf estiró sus manitas pidiéndole  con señas que se acercará de nuevo a él.

—

Eres aún más tierno así mi dulce Omega. –Sonrío mientras se acomodaba en la cama.

Gulf no tardó ni dos segundos en subirse en el regazo de su Alfa, Mew colocó sus grandes manos en los muslos de su Omega dejando delicadas caricias.

Gulf atacó sus labios sin esperar ni un segundo más era el primer celo formal que le llegaba desde que había cambiado hace unos meses atrás.

—Dime mi Omega ¿que necesitas?

—Tocame Alfa. –Pidió.

Las manos de Suppasit comenzaron un recorrido por todo el cuerpo de Gulf, al sentir las primeras caricias comenzó a gemir juntó al movimiento de cadera lento que de una manera muy placentera hacía que sus miembros se rozaran.

—Mmmgh~ –mordió su labio acelerando su movimiento.

—¿Te gusta cariño?

—¡Necesito más.! –Suplicó.

—Lo que mi Omega quiera.

Mew quitó pieza por pieza la ropa del Omega mientras dejaba caricias besos húmedos y un recorrido de su saliva por donde pasaba.

El miembro de ambos estaban más que listos para ser atendidos así que tomando al Omega de las caderas los apartó para colocarlo bien en la cama dónde lo despojó de su ropa dejándolo completamente desnudo al igual que él.

—Alfa... –Chilló con sus ojos llenos de lágrimas del placer que lo invadía por completo.

—Aliviaré el dolor lo prometo.

Después de decir eso Suppasit tomó el miembro de Gulf con su boca para atenderlo oralmente haciendo que su casa se llenará de las feromonas del Omega junto a los gemidos y el gritó que dió al tener su primer orgasmo.

—Listo. –Preguntó alineado pene.

El Omega asintió.

Suppasit entró de un sólo golpe que lo acompañó el gritó de Gulf, unos segundos después el Omega empezó a mover sus caderas avisando que ya podía comenzar.

Todo era suave, dulce lleno de amor pero el celo le había llegado de una manera descomunal así que seguía pidiendo más.

—Alfa más..maaas ¡Por favor!
–Se aferraba a las sábanas en sus manos.

—No te quiero lastimar cariño. –Dijo agitado mientras entraba y salía de un sólo golpe en su pequeño Omega.

—No lo harás te necesito Alfa.

Con esas últimas palabras cuerdas los ojos de Suppasit cambiaron dejando a cargo a su lobo el cuál lo tomó de la manera que su Omega lo necesitaba duro, placentero que calmaba con las Olas de calor que golpeaban a Gulf.

—¡Si! –Gritó cuándo el Alfa destrozaba sin descansó su punto dulce.

Gulf balbuceaba cosas sin sentido que no llegaba a entender el Lobo, pero viéndolo perdido en el placer seguía su trabajo.