A new opportunity - Sun x Moon

#2

Era temprano, el sol todavía no salía, pero se escuchaba el canto de los pájaros y la luna reflejaba un poco de su brillo al momento que la alarma sonó y con pesadez se levantó. Había recibido exactamente, como le había dicho el hombre en la entrevista, un Gmail dos días antes de empezar, el cual especificaba sus horarios, al menos por esa semana, la fecha en la que tenía que ir y el tema del alojamiento.

Esperaba un Gmail más específico de su trabajo, de lo que iba a hacer más a fondo, reglas, horarios más precisos, no que solo fuera una "carta de invitación". Pero supone, y quiere creer, que tendrán un tiempo de capacitación, no por nada dice que el horario no es exacto por el momento y la apertura del centro será dentro de una semana.

Todavía en pijama saco las pocas cajas que había hecho para la mudanza y las maletas de su cuarto a la sala para ya tenerlas separadas y poder llevárselas. El Gmail decía que las mudanzas iban a durar solo por esa semana para todos aquellos que quieran o necesiten el alojamiento en el centro, los que no se alojan en ese tiempo se les va a descontar parte del salario como pago por abuso a la confianza, y prefería no perder el tiempo con ese tema y ya quitárselo de encima eso.

Una vez todas las cajas separadas, fue a su cuarto para bañarse y cambiarse, madrugar no era su pasatiempo favorito y realmente lo detestaba, pero no tenía de otra. Tomo una ducha helada para activar su metabolismo y despejar un poco la mente, al terminar se acomodó una vestimenta formal - informar para dejar un buen perfil, y una vez listo fue al comedor para ver si su madre ya estaba despierta con el desayuno o si él tenía que prepararlo.

— ¿Buenos días? — pregunto asomándose en el comedor tratando de ubicar a su madre en la cocina.

—Buenos días, es extraño, verte temprano, ¿será que ahora mi hijo es un ruiseñor? — respondió la mujer a la pregunta, apareciendo de la cocina con dos platos de un típico desayuno americano.

— ¿Es una clase de chiste que no estoy entendiendo? —

Pregunto arreglando la mesa lo más rápido que podía, para que su madre pueda poner los platos, tratando de comprender lo que acaba de decirle, su cerebro no funciona correctamente tan temprano a pesar de la ducha y no sabía mucho sobre pájaros.

—Si así quieres tomarlo, podría decirse que sí, y gracias—

La mujer acomodó los platos para desayunar, y fue de regreso a la cocina para tomar los vasos y acompañantes que faltaban con ayuda de su hijo antes de sentarse juntos a comer.

—¿Ya tienes todo listo? —

—Claro que sí, sabes lo mucho que odio el desorden, también ya solicité un taxi, llegara seis y media—

—Viva imagen de tu padre—

—Por cierto, ¿dónde está? Ayer no escuché cuando llegó y se supone que se despierta a esta hora—

—Oh, bueno, tuvo que salir de viaje unos días, parece que el señor de la familia que cuida tiene un viaje importante y necesita seguridad—

—Entiendo...—

No ha pasado tanto tiempo, posiblemente unos seis - siete años desde que su padre comenzó a trabajar como guardia privado, razón por la que se volvió más regular no verlo en casa. Admite que muchas veces ser consciente de que en cualquier crimen que lleve a cabo puede que lo topé es algo que le aterra, no quiere ni imaginar un escenario con esa situación. No quiere involucrar y mucho menos que se involucre su familia en sus propios problemas, él toma y tiene todas las responsabilidades de sus actos, no ellos. Y dejando de lado sus acciones cuestionables, tampoco le gusta el hecho de que su madre quede sola por mucho tiempo, no sabe cuándo vuelva su padre y aunque vuelva es difícil que pase más de una mañana o noche en casa.