๑˙❥˙¿olvidarte?

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buenas, este es un intento de fanfic(?
es la primera vez que hago esto, así que si no hay coherencia, va demasiado rápido o es muy corto en algún momento, una disculpa, espero les agrade el texto de este novatx<3



En los últimos años las calles de la ciudad de Tokio se habían tornado peligrosas debido a la cantidad de pandillas que rondaban por todo el país, las conversaciones que podías encontrarte normalmente, así te encontraras en lugares públicos o con pocas personas, lo que siempre estaba en boca de las personas trataba sobre los encuentros y peleas que estas pandillas tenían, comúnmente con resultados no muy buenos. Ya era común escuchar sobre la muerte de jóvenes en estos encuentros, las personas lamentaban los hechos pero no comprendían el porqué realizaban tales cosas, nadie sabía con certeza la situación completa por la que los jóvenes tenían que pasar.

En los últimos días este tema había estado presente más de lo normal, ya que recientemente se había oído hablar de un enfrentamiento nuevo que por lo que se sabía había dejado una persona muerta. Poco tiempo después se dió a conocer la información de que ese hecho se trató de un enfrentamiento entre dos pandillas bastante conocidas en la ciudad, las cuáles eran "Tokio Manji Gang" y "Tenjiku", la identidad de el jóven que murió en este suceso era "Izana Kurokawa".

Volviendo a la perspectiva de los jóvenes que participaron en este encuentro, todos quedaron afectados de alguna manera, se habló de sentimientos que al jóven Manjiro Sano le habría gustado expresar de mejor manera, si Izana siguiera con vida. Pero harían todo por dejar este hecho en el pasado.

Un poco de tiempo después dos integrantes que participaron en este encuentro se reunirían para con seguridad decir adiós. Estos dos jóvenes eran Seishu Inui y Hajime Kokonoi, pocas personas, incluyendo a sus compañeros de pandillas conocían información sobre su pasado y la relación que tenían ellos dos, parecían ser bastante cercanos, pero estos mejores amigos realmente no llevaban una relación muy sana.

El motivo de su encuentro era para despedirse, prometieron que sería la última vez que estos dos amigos se encontrarían, juraron tener caminos diferentes y cada uno formar su propia vida sin la compañía de el otro. Ninguno de los dos parecía tener una buena expresión con esta decisión, pero sabían que era lo mejor.

-Ahora me despido, Inupi...- Mencionó Hajime mientras lo miraba fijamente, no se sentía seguro de esta decisión, pero quería lo mejor para él, dió un último vistazo a su rostro para al menos tratar de guardar una imagen de él en su mente, un hermoso recuerdo.

-Hasta pronto, Koko...- Dijo Seishu tratando de evitar el sentimentalismo, quería lo mejor para los dos, así fuera doloroso.

Hajime sonrió de manera divertida, como siempre lo hacía estando con él, para después tomar su hombro y luego caminar al lado contrario, hacia su propio camino.

No volverían a encontrarse, esa fué la promesa que hicieron aquella fría, desolada y triste noche. Cada uno tomó su propio camino, Seishu se alejó de el mundo de las pandillas, junto con su mejor amigo Draken, formaría lo que sería su trabajo, un taller de motocicletas.

Hajime, por otro lado, continuó en ese mundo, sabía que era peligroso, arriesgado, pero de alguna manera no podía adaptarse a algo diferente, además de que logró incluirse en lo que era la organización más grande y poderosa de el momento, "Bonten". Ganaba una buena cantidad de dinero, eso era algo importante para él.

Seishu fué capaz de convertirse en alguien sencillo y honrado, era bastante feliz trabajando al lado de Ken, siempre preocupándose el uno por el otro, eran un equipo excelente, día tras día llegaban clientes, su vida era finalmente era pacífica y la vivía al lado de alguien a quien apreciaba demasiado. No había sabido nada de Koko en mucho tiempo, pero de igual manera no era algo que tuviera en la mente todo el tiempo, poco a poco lo olvidaría y podrían mantener su promesa.

Después de todo, estaban en mundos completamente diferentes.

¿Qué podría pasar?

Era la tarde de Jueves, el clima era bastante soleado por lo cuál Seishu se encontraba un tanto deshidratado caminando por la calle, pero podía soportar, tenía que ir a comprar algunos materiales y herramientas que Ken necesitaba.

Ciertamente la calle estaba un poco desolada por lo cuál era algo bueno para él, normalmente no acostumbraba a estar en lugares con muchas personas. Terminó de comprar los materiales que ocuparían y comenzó a caminar para llegar al taller en dónde Ken lo esperaba.

Estaba apunto de llegar cuando escuchó pasos que parecía que se acercaban a donde estaba él, se mantuvo inmóvil por un momento. No lograba ver nada cuando de pronto un hombre salió corriendo de una avenida, Seishu se encontraba a distancia pero se asustó un poco al apreciar el estado de el hombre, pudo notar que este estaba herido ya que observó que apenas podía correr, se tambaleaba. Al observar todo esto detenidamente trató de acercarse al hombre pero retrocedió cuando observó que un auto color negro con apariencia de ser costoso se acercaba al lugar, no había personas al rededor, sólo pudo observar como aquél auto se detenía frente al callejón al que había escapado el hombre, su corazón latía rápido, sin conocer la situación completa sentía miedo y no se sentía capaz de hacer algo al respecto.

Se quedó inmóvil, logró mirar como un hombre de complexión delgada y cabello un tanto largo de color púrpura bajaba de el auto, tenía un porte elegante y rostro definido. Observó como aquél hombre se acercaba al callejón, su sorpresa fué cuando logró apreciar como el sujeto introducía su mano dentro de su ropa para después sacar algo que aparentemente era un arma, esto provocó que Seishu rápidamente saliera corriendo, tratando de llegar rápidamente a su destino, mientras corría sólo logró escuchar un disparo.

Llegó rápidamente al taller y comentó un poco a Ken de lo sucedido, este notó que Seishu estaba bastante agitado y nervioso por lo cuál su única reacción fué abrazarlo para que mantuviera la calma.

-Inui, tranquilo... lo importante es que estás bien...- Dijo Ken mientras podía sentir como el corazón de Seishu bajaba su velocidad a un ritmo más calmado.

-lo que lograste ver probablemente fué un conflicto relacionado con alguna pandilla, lo cuál ya no te incumbe, así que trata de no preocuparte tanto-

Seishu simplemente asintió y se dirijo a su lugar de trabajo, estaba pensativo y confundido, la persona que logró apreciar era alguien que de alguna manera tenía la sensación de haber visto antes, pero no tomó importancia a ello y continuó trabajando, cuando sintió estar olvidando el tema, inconscientemente susurró.

-Koko... ¿aún estarás incluído en esas cosas?-

Se quedó en blanco por un momento, sólo teniendo vagos recuerdos que creía ya no tenían importancia.

Yyy listo- ¿fué demasiado para esta primera parte? quizás sí, como podrán notar no cuento con mucha imaginación, pero se hace el intento, espero que sea de su agrado<3

๑˙❥˙𝐏𝐨𝐫 𝐋𝐚 𝐕𝐮𝐞𝐥𝐭𝐚. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora