Neylan Sultán

Capitulo 5

Abasi

No sabía que pensar al respecto.

Extrañamente Neylan me había invitado a cenar a con ella, no tenía problema con eso, de hecho me gustaba la idea, pero mi pregunta era ¿Por qué me invitaba? Se supone que ella y yo estábamos enojados o creo que eso pensé yo.

Sea cual sea el caso, está es una gran oportunidad para ganarme aunque sea un poco el corazón de Neylan, necesito que ella acepte ser mi esposa y que se queda para siempre a mi lado, yo sé que lo que hice hace unos años afecto a su orgullo, pero me deje llevar por los impulsos, al menos está vez no hice lo mismo.

- Vengo a ver a la sultana - le dije al aga que estaba en la puerta.

- Puede pasar - dijo y abrió la puerta.

Quizás Neylan ya les había dicho que me dejarán entrar.

Cuando entre ví todo a mi alrededor y mi mirada se detuvo en Neylan, sentía que estaba planeando algo y creo que no me equivocaba, ella llevaba un hermoso vestido color blanco con algunos bordados, juro que si no fuera por qué ella es una sultana ahora mismo la hubiera puesto en la cama, pero tengo que controlarme por qué ella no es una mujer cualquier, es la sultana Neylan, hija de la sultana Hurrem y el sultán mustafa, hermana del sultán Kiral y mejor guerrera del imperio otomano, un movimiento en falso y no dudo en que pueda matarme, aunque morir por sus manos sería un privilegio del que no todos pueden gozar.

- Sultana - la saludé cuando pude salir de mis pensamientos.

- Abasi - murmuró divertida, ella sabía lo que podía causar en mi - hay que sentarnos y conversemos.

¿Cómo le digo que quiero hacer un momento de cosas con ella, pero conversar no está entre esas cosas?

- Claro - murmure mientras me sentaba y ella copiaba mi acción.

- Entonces dime  ¿Cómo te ha ido todo este tiempo? - preguntó mientras comenzaba a comer.

- Como normalmente me va, todo bien - respondí mientras yo también comía.

Era mejor simplemente concentrarme en la conversación y olvidar lo otro, no me traería nada bueno tener pensamientos como los anteriores.

- Bueno supongo que tu vida como rey no es nada aburrida, debes tener tus métodos de distracción - dijo mirandome mientras se metía una cucharada más a la boca.

Pase saliva fuertemente.

- Claro, son muy buenos, deberíamos probarlo - cuando me si cuenta lo que dije me corregí de inmediato - quiero decir, que yo podría decirte cómo me relajo puedes hacer lo mismo si quieres.

- Lo agradezco, pero yo tengo mis métodos de relajación - sonrió.

- Bueno si necesita más métodos, no dude en decírmelo.

- Claro, se lo diré - respondio.

El ambiente estaba demasiado pesado paga mí gusto, no sé cómo estoy haciendo ahora mismo para controlar el impulso de tirarme encima de ella.

- ¿Le gusta mucho mi vestido? - preguntó.

Fue cuando me si cuenta que había estado mirando sus pechos fijamente.

- S-si está muy bonito - respondí.

Me estaba comenzando a poner nervioso y eso era algo que nunca me pasaba, normalmente simplemente le diría a esa mujer que me gusta y la tendría de inmediato en mi cama, pero Neylan diferente.

- Lo sé, a mi también me encanta, me da mucho movilidad.

Se puso de pie y se paró delante mío, aguante la respiración por su acercamiento repentino, comenzó a hacer unos movimientos demasiado tentadores para mí.

- Me gusta mucho bailar y este tipo de ropas es perfecto para un baile hermoso, mi padre solía decir que herede ese talento de mi madre.

Mis oídos la escuchaban, pero mi mente estaba completamente concentrada en el movimiento de sus caderas, era suave, pero sensual.

- No conocí a tu madre así que no puedo saberlo - murmure.

- Supongo que si.

Se detuvo y juro que quería decirle que no había necesidad de detenerse, que yo en verdad estaba disfrutando de su baile, cuando se sentó fue más cerca de mi, esto no iba a terminar bien si ella seguía con esta actitud.

- Ya no tengo hambre - murmuró y recostó su cabeza en mi hombro.

Mi cuerpo de inmediato se tensó y las manos me picaban por atraerla más a mi cuerpo, pero puse toda mi fuerza de voluntad en permanecer quieto.

- Deberías comer por qué si no, no tendrás fuerza para entrenar.

- Quizás tengas razón, pero un descanso no me vendría mal.

Levanto su cabeza y la volteo hacia mi, su rostro quedó a centímetros del mío, si tan solo pusiera mi cabeza un poco más adelante, sus labios y los míos se encontrarían y eso sería completamente perfecto.

- Después de todo, siempre necesitamos darle un descanso a nuestro cuerpo - murmuró casi sobre mis labios.

Mi respiración se agito sin querer y cuando estaba apunto de coger su cintura para atraerla más a mi se levantó rápidamente.

- Quizás sea de mala educación, pero como le dije, no tengo hambre y estoy un poco cansada, necesito descansar así que si no le molesta le voy a pedir que se retire, fue un gusto conversar con usted, espero que se vuelva a repetir esta maravillosa cena.

¿Maravillosa? ¿Que tenía esto de maravilloso? Tan solo quiero arrinconarla sobre esa pared que tiene detrás suyo y tenerla para mí.

Me levanté algo molesto y hice exactamente lo que quería.

- ¿Te gustó jugar conmigo? - pregunté con voz ronca.

- No recuerdo haber jugado contigo, pero si deseas podemos jugar otro día, con mucho gusto lo haré - sonrió inocentemente.

- Neylan, no juegues conmigo - amenacé.

- ¿Eso quier decir que no quiere jugar conmigo? - hizo un hermoso puchero, si de verdad Neylan era una copia exacta de su madre me imagino lo difícil que fue para el sultán mustafa no estar todo el día con la madre de Neylan - podemos tener una pequeña competencia de arco y flecha si lo desea - se acercó a mí.

- Neylan - advertí, mi respiración volvía a estar agitada.

- Herma.. - Meryem entro a los apocentos de Neylan e inmediatamente deje de acorralarla - ¿Interrumpí algo? - preguntó como si no supiera la respuesta.

- No, para nada llegas justo a tiempo, Abasi ya se tenía que ir - dijo con una sonrisa y comenzó a caminar hacia su hermana - gracias por esta hermosa cena, volveré a invitarlo pronto.

Solté un suspiro molesto y lo único que hice fue asentir de mala gana.

Salí de sus apocentos furioso ¿Quería jugar conmigo? Veamos quién puede jugar mejor.

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Ahhhh, primer capítulo narrador por nuestro querido rey de Egipto.

¿Que les pareció?