Let's try this one more time

Capitulo I: Pilares

Pasaron 2 semanas desde aquel día en que su padre le legó su ideal, encontró en él nuevas facetas de su personalidad. Dejo atrás esa actitud reservada y deprimente.

Si bien aún no había brillo en su mirar, sus expresiones corporales eran claramente distintas, más vividas, agiles y perceptivas.

Otro gran cambio fue que acepto enseñarle los principios básicos de la hechicería, descubrió que su origen y elemento eran uno solo, ''Espada'', era ciertamente una extraña coincidencia, tener ambos fundamentos en un solo concepto podría considerarse una mutación.

A diferencia de otros de su clase él no podía usar magia elemental normal, o le era imposible o muy difícil, debido que el costo de ejercerla seria mucho mayor al de otros, pero no quitaba que aun podía aprenderlas solo por conocimiento popular.

El viejo magus le explico sobre su profesión mágica y como esto lo llevo hasta donde está hoy en día, inicialmente fue un gran choque a la percepción inicial que tenia de él, pero poco a poco entendió el porqué de sus acciones, puede que aun sea un niño él podía comprender tales acciones.

Vivir como un magus era vivir al filo de la muerte, donde un paso en falso te llevaría a una muerte nada placentera. Puede que la moral del mundo iluminado por la luna fuera mas abierta sobre diversos temas a la hora de investigar, pero aun así estos tenían un limite que no se debía cruzar.

Su padre trabajo como autónomo bajo las ordenes de la Asociación de Magia y la Santa Iglesia, dos entidades encargadas de velar por mantener el secretismo de la comunidad. Cazaba miembros que sobrepasaron los limites permitidos y eran claramente un peligro no solo para sus homónimos, sino también para simples mortales.

En cuanto a sus capacidades mágicas, no había mucho que resaltar ya que solo tenia acceso a dos tipos, Proyección y Refuerzo. Ciertamente magias de lo mas despreciadas en la comunidad por su poca utilidad y falta de investigación. A esto se le sumaba una cantidad de circuitos mágicos ligeramente superior al común siendo 27 con una calidad estándar.

Donde vio más luz fue en sus capacidades físicas, un atleta innato. Enseñarle solo su oficio limitaría enormemente y nublaría el potencial que esta tenía. Necesitaba un maestro capaz de enseñarle, pero esto tendría que aguardar o talvez no.

Dinero no era el problema, durante la guerra todos los costos fueron llevados por el viejo Acht, el problema era que su ubicación podría ser expuesta y diversos enemigos irían a darle caza dado su estado vulnerable.

Contacto con sus viejos informantes, muchos lo creyeron muerto por la nula actividad que tuvo luego de la guerra y algunos informes presentados a la asociación. Si bien era temido por muchos debido al titulo que llevaba, hubo otros que se situaban en el polo opuesto, siendo atraídos por las técnicas del Magus Killer. Entre ellos una joven una joven ejecutora de la iglesia.

Según los rumores era alguien reservada y comprometida con su trabajo, pero en palabras de otros también podía mostrar una faceta de hermana mayor/maestra, cuando se le contacto mostro cierto interés por la propuesta, después de todo Kiritsugu no solo era temido por otros magos, el miedo que infundía el hombre de la bolsa llega incluso a criaturas como los Apóstoles Muertos. Seres a los cuales esta mujer tenía una excesiva inclinación por eliminarlos debido a excéntrico pasado con ellos, y aprender alguna que otra técnica de tal persona seria realmente beneficioso para su causa, puede que la comunidad mágica en general tenga una mala imagen de él, pero los altos mandos reconocían su eficiencia y empeño en eliminar cualquier ente que trate de dañar a otros, ciertamente eran pocos los que entendieron al asesino.

Se pacto que entrenaría al pelirrojo a cambio de un sustancioso pago y a su vez él la instruiría en técnicas propias para hacer frente a tales engendros, puede que ella tenga un talento más la falta de experiencia y pericia podría provocar que mas personas sufran, no quería tener que repetir un episodio similar al de su niñez, cuando aquel mal surgió en ella.