Capitulo 29: Kael y los vampiros.

111 10 2
                                    

-. Si, mamá, todo está bien.-respondí al celular mientras bajaba del taxi-. No, solo profesores y costumbres extrañas, pero todo en orden. Nada nuevo.

Llegue al hospital donde haría mis practicas en unas horas, más vale estar antes que nunca o eso era lo que yo decía.

Mi madre había llamado de sorpresa, la mayoría de ocasiones era yo la que llamaba e incluso ya teníamos un horario acordado, la noticia del asesino se había extendido hasta Seatle.

-¿Y Kael, como esta?-preguntó mi madre a través del celular

Al mencionarlo, recorde lo que ocurrió con Kael la última vez que lo vi. Paro en seco y me dan escalofríos de solo recordar aquella mirada de advertencia y el tono de su voz al que había cambiado. Esa fue la última vez que lo vi, después de eso, solo hemos platicado por vía celular, no más de eso.

Ni si quiera nos cruzabamos en la universidad debido a que me centre en la mudanza y en los proyectos para las prácticas de hoy.

-. Esta bien.-me limitó a contestar mientras comenzaba a caminar nuevamente-. Saludame a papá, voy a colgar.-avisé

Mientras subía las escaleras escuchaba a mi papá a lo lejos decirme: "Aléjate de los tipos malos", yo me reí de solo imaginar "Que tipo" sería Len para el. El celular se me cayó.

Hatsune Miku estaba entrando abrazada del brazo de Kael, ¿Como era posible? ¿Como se conocían? ¿Que no Miku solo tenia ojos para Len? Si bueno, yo quiero creer que Len ya tiene claro todo con ella.

* * *

Rin Kagamine
Japón.

La noche había llegado dos veces más fría, meciendo todos los árboles de la mansión nipona de los Kagamine.

Rin llevaba puesto su kimono carmín, la única vela encendida en toda la mansión, era la de ella.

El ambiente parecía de luto y los ojos de sus sirvientes brillaban centellantes en la oscuridad, cuales bestias esperando a que la presa pisará la trampa.

-. Ama, soy yo, ¿Quiere más té?-escuchó al otro lado de la puerta.

Entonces, aquel recuerdo vago le atormenta de nuevo.
La figura de una mujer, paseando por los pasillos de la mansión. Discreta, sutil, perspicaz.

《"Señora mía, soy yo, ¿Quiere más té?》

Siempre buscó darse a notar.
Siempre fue la mejor o la peor.
Pero, así fuera la peor en 100 cosas, en otras 100 se destacaba perfectamente.

Rin observó frente a ella, en el espacio vacío del suelo. El fantasma de aquella mujer haciendo una reverencia hasta el suelo y luego ofreciendo una manta. Como si nunca se hubiera dado cuenta del pecado que carga el apellido Kagamine.

La mesa crujio debajo de los dedos de Rin, se había excedido de fuerza. Le enfermaba saber que ahora la paz de esto dependiera de la acción que hizo su hermano con aquella humana.

Se levantó y camino hacia la puerta corrediza, en lugar de dejar pasar a su sirvienta Rin salió y se sentó en la orilla de la plataforma del suelo.

-. Acompáñame.-le ordenó la rubia

-. S-si, ama.-contestó la chica

Pero entonces, Rin se dio cuenta de algo, el té no era la taza que le había ofrecido aquella joven. Le habían mandado a una humana.

Cuando estaba estrictamente escrito por Rin no tener ningún humano en la mansión.

-. Me sorprende que usted no tenga ni un poco de frío.-mencionó la chica sentándose al lado de Rin

Rin no respondió.
Hace tiempo que ni si quiera sentía el frío, el calor, el dolor o algo que le hiciera sentirse...

-... Viva.-murmuró Rin

Irónicamente, esperaba sentir aquello, algún día, en algún año nuevamente. Pero no, estaba estancada, igual que su hermano y no eran capaces de sentir el calor del fuego, el filo de una navaja.

-¿Perdona?-cuestionó

Rin la observó por unos segundos. Peli negra, pómulos marcados y la boca pequeña. Pero el brillo en sus ojos marcaba su salud.

-¿Como te llamas?-musitó Rin

-Sophie-respondió

Rin la sujetó del mentón.

-. Gracias, Sophie.-susurró

-¿Eh? ¡Ah, por cierto, hoy que fui al mercado, una mujer me dio esto para usted!

Rin primero se extrañó, Sophie le dio una hoja, entonces, cuando Rin la desdobló miró a Sophie.

-. Vete.-le dijo al mismo tiempo que se levantó la rubia y entró a su habitación

《¿Y tú, todavía te diviertes?》

Rin bajo la nota, ¿Era una mala broma?, era imposible y entonces, cuando creyó que era todo le dio vuelta a la misma nota. Era un boceto, el boceto de alguien que conocía perfectamente.

Una lágrima recorrió su mejilla.




* * *

_________ Montgomery

Me encontraba en la sala de espera, con mis papeles y mi credencial de estudiante en mis manos. La imagen de Miku con Kael merodeaba mi cabeza de la peor manera.

Kael sabía que no me agradaba en lo absoluto, ¿y si eran algo? ¿la cito por venganza? Pero yo lo único que hice fue cuestionar.

Pérdida en mis pensamientos, vibró mi celular con la leyenda de: "Tienes una publicación guardada sin revisar". Al ver la imagen en miniatura, recorde el artículo de esta mañana.

Mire la hora en el reloj digital que se encontraba en la pared frente a mi. Pase la vista hacia ambos lados del pasillo en el que estaba. Entonces me decidí abrir la página.

V A M P I R O S

Ojalá nunca hubiera revisado esa página...

Una verdad terrorífica...

Ojalá no hubiera hecho caso a mi curiosidad...





Ojalá, no hubiera leído aquel artículo.

Mi novio es un vampiro (Len y tu) (+13)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora