Cita a ciegas número 101 de dos alfas

Período refractario

Una vez que se calmaron, Lu Meng extendió la mano y presionó el área del cuello de Li Ze que se había hinchado, curioso: “¿Esta es tu glándula? ¿Por qué está hinchado?

Li Ze apartó la garra de un golpe y entrecerró los ojos, reflejando las acciones de Lu Meng y presionó el área que casi había mordido antes, "También la tuya".

"¿Déjame tomar un bocado?" Lu Meng era todo sonrisas mientras persuadía al otro. Parecía tentador, y estaba seguro de que el sabor sería seductor aunque él mismo no pudiera captar el aroma.

Li Ze cerró los ojos, sabiendo que el otro en realidad no tenía las agallas para hacerlo. Presionó sus labios en una línea delgada, “Claro, ¿entonces me dejarás comer un bocado también? Meng Meng.

Lu Meng: "......"

……

“Oh cierto, también llenaste el formulario. ¿Cuáles eran tus preferencias?

Li Ze pensó en los espacios en blanco que había llenado y luego tachado, y resopló, obviamente no dispuesto a discutirlo.

"Vamos, dime..." Lu Meng se inclinó, "¿Cuál era tu preferencia de feromonas?" Li Ze era diferente a él, mientras que él no podía captar el olor de las feromonas Omega, Li Ze sí podía, pero no se veía afectado por ellas.

Li Ze fue molestado hasta el punto de un dolor de cabeza. Después de algo así, ¿no sería mejor una siesta tranquila que hablar de esto? Este pequeño bribón era tan revoltoso.

Aún así, arqueó los labios y terminó revelando lo que había escrito en el formulario: "El aroma amaderado del sol que brilla sobre el heno, es ligeramente dulce".

Lu Meng lo miró fijamente. Solo había pedido diversión y no esperaba que Li Ze tuviera una respuesta tan detallada.

Se dio la vuelta, abatido, "Oh..."

Li Ze estaba confundido mientras miraba su espalda. ¿Que está mal? El aroma amaderado único que impregnaba el aire incluso había comenzado a adquirir un toque de amargura.

"¿No me digas que ni siquiera puedes oler tus propias feromonas?"

Lu Meng golpeó su mano, “Hace cosquillas. Y no puedo olerlo.

Li Ze lo miró fijamente, en blanco, "Entonces, ¿qué escribiste en esa sección?"

De repente, Lu Meng no tenía ganas de decírselo, por temor a que Li Ze se volviera complaciente. A pesar de que no podía oler las feromonas, el olor que encontró más reconfortante fue la fragancia de tabaco en el cuerpo de Li Ze...

“¿Lu Meng? ¿Meng Meng?

"Deja de molestarme."

Li Ze sintió que esto era ridículo, como si lo hubieran usado y tirado, y dijo sinceramente: "Eres incluso más voluble que un Omega".

Lu Meng resopló, luego encontró una excusa para sí mismo: "Estoy en mi período refractario".

Li Ze: “……”