Cita a ciegas número 101 de dos alfas

Hierba de salvia

Li Ze abrió cuidadosamente el paquete, dentro había una botella de color azul celeste.

En él estaba escrito: Fragancia afrodisíaca [Hierba de salvia]

Li Ze se apoyó en la cama, sopesando la botella de fragancia en su mano con un pensamiento lamentable, tal vez tendría que confiar en esto para pasar el resto de su vida.

Mientras el aroma de la fragancia llenaba el aire, Li Ze pensó en el rostro de Lu Meng, enroscando su puño alrededor de su erección endurecida, pasando lentamente su mano a lo largo...

Pero eso no está bien, Li Ze negó con la cabeza, no es lo mismo. Cuando finalmente llegó al clímax, la habitación estaba tan silenciosa que era aterrador. El olor era obviamente similar, pero no podía ser más diferente. Mientras uno lo excitaba, el otro solo podía llenarlo de frustración.

Mirando su propio reflejo en el espejo, Li Ze vio cómo la glándula de su cuello no había reaccionado en absoluto. No pudo contenerse y rió amargamente, hundiendo su cara en el lavabo. El líquido claro de sus ojos se perdió en el agua fría.