Cita a ciegas número 101 de dos alfas

Contrato de compromiso

Li Ze estaba parado en un rincón bebiendo solo después de rechazar con tacto la invitación de una mujer Omega. Tal vez sería mejor que volviera para comprobar si ese pequeño bribón había recuperado la conciencia... De lo contrario, si el otro no lo viera, podría comenzar un alboroto.

"Tío Li, tía Li".

Lu Meng dio un saludo elegante.

“Xiao-Meng, ¿estás dado de alta? ¿Por qué Li Ze no lo mencionó?

"Tal vez está demasiado ocupado". Lu Meng respondió con los dientes apretados.

Era imposible para Li Ze no notar a esa persona, y frunció el ceño. ¿En qué estaba pensando, corriendo en lugares llenos de gente y presumiendo inmediatamente después de recuperar la conciencia? Realmente estaba pidiendo una paliza.

Se abrió paso entre la multitud y tiró de Lu Meng, listo para arrastrarlo hacia el dormitorio.

Aprovechando la situación, Lu Meng agarró su mano: "Tío, estoy aquí para buscar una alianza matrimonial".

Li Ze se dio la vuelta bruscamente. Aparte de él, tenía una hermana pequeña que era una Omega, y solo alcanzaría la mayoría de edad al año siguiente.

Si Lu Meng se atrevía a decir algo sin escrúpulos, incluso el propio Li Ze no estaba seguro de qué tipo de acción tomaría contra él.

¿Lu Meng era un poco consciente de sí mismo? Como dice el dicho popular, la posesividad de un Alfa nunca debe subestimarse.

Sonriendo, Lu Meng sacó el objeto preciado que había guardado en el fondo de su caja de juguetes: “En aquel entonces, Li Ze y yo firmamos un contrato de compromiso. ¿El tío y la tía todavía recuerdan?