Conociendo al papá murcielago

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Habían pasado 4 años desde la ultima vez que vio al Comisionado Gordon o como ella le decía "James" la ultima vez que lo vio hace 3 años fue cuando la dejo en ese maldito orfanato, no lo culpaba ni lo odiaba, sabe que no lo hizo con mala intención el no podía hacerse cargo de ella y ese lugar era el único "decente" que le dijeron.

Claro fue mentira, ese lugar era una mierda, las personas que trabajaban te alimentaban con miserias o sobras de lo que ellos comían, algunos incluso se drogaban.

James no lo sabía, por supuesto que no lo sabía de haberlo sabido nunca la hubiera puesto en ese lugar, pero ya no importaba hace 2 años que se escapó del orfanato que solo le dejo cicatrices en todo su cuerpo, más de los que ya tenía.

Aunque de algo bueno salió todo eso, conoció a Jason Todd a quien considera su hermano mayor ella ya tenía 9 años el era el mayor por tener 12 años, el también estaba en ese orfanato y era huérfano al igual que ella, escaparon juntos, no fue difícil los de ahí eran unos idiotas, noquearlos fue como robar una golosina.

Vivían de robarle a los ricos, era un pasatiempo increíble, Jason le enseñó un poco de defensa personal, si antes Marley sabía pelear ahora lo podía hacer mejor, claro aún le faltaban muchas cosas pero en estos momentos no importaba.

Justo ahora iban a ir a robar a otro riquillo engreído que tenía en su lista negra.

-Bien Mar Mar- Señaló Jason -ya tienes todo listo ¿cierto?- miro a Marley ladeando una sonrisa juguetona.

-Por su puesto Jay, por quien me tomas?- jugueteó Marley mientras sacaba una pistola 9 mm de su mochila.

-Por su puesto Jay, por quien me tomas?- jugueteó Marley mientras sacaba una pistola 9 mm de su mochila

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-Bueno la última vez olvidaste cierta maleta en casa...- se burló Jason mientras caminaba hacia la casa del engreído.

-Hey! Eso no había sido mi culpa si no tuya era tu turno llevar la maleta- se defendió Marley haciendo un puchero mientras seguía a su hermano cruzada de brazos.

-JAJA, como tú digas hermanita- siguió burlándose Jason.

-Cimi ti digis hirminiti- ádremedo Marley.

Iba a decir algo más pero de repente vio como su hermano se detuvo justo antes de llegar al objetivo.

-Pss qué pasa Jay?- le preguntó Marley a su hermano.

-Mira ahí- señaló un callejón -ví algo valioso ahí dentro, quieres ir a robar algo diferente hermanita?- se volteo para mirar a Marley y ver sus expresiones.

Marley se puso seria y miro a su hermano para ver si no era alguna de sus otras bromas, Jason noto eso y rodo los ojos.

-Se lo que piensas y no, no es una broma ahora ven- la arrastro del brazo hacia el callejón.

-Oye espera!- se reincorporó y le siguió el paso a su hermano, no iba a ser un costal de papas.

Ambos llegaron al callejón y lo que vieron los dejó asombrados, sus ojos brillaron de la emoción, como cuando un niño prueba un caramelo por primera vez, bueno la sensación era parecida.

Tómame y no me dejes ir Donde viven las historias. Descúbrelo ahora